Un bomboncito que me comí por destino divino

Esto me pasó el verano pasado antes de la pandemia. Soy un hombre de 54 años separado hace bastante tiempo, vivo solo y he tenido y tengo mis relaciones sexuales ocasionales, pero nunca me pasó lo que paso a relatar.

Mi hermana y mi cuñado tienen una casa quinta en el campo y me invitaron a pasar un fin de semana, también invitaron a un matrimonio amigo de ellos quienes trajeron a su hija.

Cuando llegué cómo hacía calor me metí a la pileta. En un momento la hija a la que llamaremos Jazmín, era bastante inocente para tener dieciocho años, entro a la pileta. En cierto momento ella se sumerge y aparece debajo mío y siento que con sus manos me roza mi pija… por lo que me asusté y supuse que no fue un roce con intención pero rápidamente salí del agua para evitar malas interpretaciones y porque realmente me sentí incómodo. 😃

Almorzamos y con los hombres nos pusimos a jugar al truco, algunos se fueron a una feria en un pueblo a dos horas de la casa.

Pasaron alrededor de dos horas y medias cuando una llamada al celular de mi cuñado informando que habían tenido un accidente y que todos estaban internados en un hospital zonal distante unas tres horas, con la desesperación del caso mi cuñado y los demás hombres se alistaron para salir urgente…

Mi cuñado me pidió que le abriera el portón que está distante unos 200 mts de la casa para sacar el auto y me dejó las llaves diciéndome que me avisaba cuando regresaban así le abría. 😃

Se fueron y volví a la casa, Jazmín estaba recostada en una hamaca paraguaya estaba con su celular.

Me fui a la pileta, el agua estaba fresca y hacia un calor de infierno, me tiré un largo y me quedé distante de Jazmín disfrutando el agua, en un momento ella se metió nadando por debajo del agua y apareció tomándome de las piernas para salir a la superficie a la altura de mi pecho, sorpresivamente me tomo con sus manos del cuello como si no pudiera hacer pie, riendo gritaba me ahogo y apretó su cuerpo contra el mío, mi reacción fue de sorpresa y quise sacarla casi por instinto; pero ella me sujetó más fuerte y sentí como claramente apretó su conchita contra mi paquete.

Jazmín se apretaba más contra mi cuerpo, sus ojos estaban llenos de lujuria, entreabría la boca como una hambrienta cachorrita deseosa de leche, sentí sus pechos redondos endurecerse como así también sus pezones puntiagudos, erectos a punto de descoser la maya rosa y fucsia. 😜

La sentí resoplar un aire tibio, caliente cerca del lóbulo izquierdo de mi oreja, un par de gemidos entrecortados trató de ocultar con su risa simulada.

Ya no me cabían dudas que lo de Jazmín no era un roce o un toqueteo inocente y sin intención a causa del juego, la pendejita se apretaba claramente contra mi pija, luego apoyo su hermoso culito contra mi tronco, ufff sentí como mi cabeza escupía unos chorros de líquido semanal. ¡¡Me ahogo, me ahogo!! Decía risueña y se refregaba sin miramientos para luego extender sus brazos hacia atrás y tomarme de cuello.

Instintivamente apoyé mis manos en sus pechos duros y los apreté suave, con los dedos en forma de pinza le apreté los pezones, un suspiro largo y quejoso salió de su boca mientras sentía su cuerpo contraerse, quizás haya sido su primer orgasmo sin dudas.

¡¡¡Que rica!!! Me salió decir y le besuqueé el cuello.  ¿Te gusta? Le pregunté con mi aliento caliente en su oído… sí, me dijo todavía conmovida por el relámpago de su primer orgasmo. 😎

¿Qué te gusta, que te toque o lo que tengo duro y te apoyo?

Todo, me dijo.

La apretaba más contra mí, la besaba en el cuello, le metía la lengua en el oído y con mis manos le acaricia las piernas, rozando los bordes de su conchita.

Querés que te siga tocando, mi amor? Siii

Salí de la pileta, me sequé a medias y al mirar a Jazmín ví que ella como hipnotizada me seguía mirando el paquete.

Tomé el celular para ver si tenía noticias, nada. Regresando a la pileta, la pendeja quería pija. Veni, le dije y la llevé al cuarto que está junto a la pileta dónde hay un baño, una ducha y un cuarto bastante amplio dónde ni cuñado guarda las reposeras, sombrillas y colchones inflables. La llevé de la mano, se dejó llevar, si bien noté sus nervios sentía sus deseos de seguir descubriendo, que sabía de alguna forma lo que se venía.

Tiré unos de los colchones inflables a lo largo de la reposera, me di vuelta, la miré con una mezcla de ternura y deseo, ella sonrió nerviosamente. 😍

La acaricie la cara, de mujer sensual, me acerqué lentamente besándole los labios cerezas cargados de humedad y lujuria, ella cerró los ojos y me respondió los besos, le introduje mi lengua estilete tomándola del cuello, entendió automáticamente que hacer con su lengua.

Si la voy a hacer lo voy a hacer bien me dije. Mientras le comenzaba a quitar la maya le decía quiero verte desnuda mi amor, sos toda una mujer hermosa y quiero disfrutar cada centímetro de tu cuerpo. Les juro que he tenido muchas mujeres desnudas y hermosas que me han hecho sentir sensaciones fabulosas, pero ver a esta pendeja en bolas, toda suave lisa, virginal era un verdadero deleite de los dioses, La hice girar alrededor de mi mano para contemplar en todo su esplendor.

Un bombón único, piel morena, ojos verdosos y llenos de luz, cara de ángel y demonio a la vez, pechos perfectos por su redondez, dureza con sus pezones puntiagudos que llamaban a unas chupadas descomunales, cabello negro azabache cayendo como lluvia prístina sobre los hombros, cintura cósmica, diminuta de dónde partían los pliegues del culito más glorioso que jamás haya visto en mi vida, con el pequeño movimiento se movía como gelatina como un flan rebosante de almíbar y crema. 😘

La entrada al paraíso, dejaba vislumbrar los bordes morados dónde la humedad se le empezaba a escurrir como el rocío sobre los pétalos de una flor, toda lampiña o casi toda si no fuera por esos tres o cuatros pendejitos que se asoman como pequeños tallos negros y como bañados con brillantina.

Cuando al fin introduje mi lengua en su hueco, Jazmín pegó un suspiro profundo y empezó a gemir con desesperación, me tomó de la cabeza y me empujaba para que metiera toda la lengua dentro suyo, jugué con su clítoris a un ritmo sostenido pero acompasado, acabó como una yegua, tenía ni boca llena de su leche tibia, no era dulce, ni salada, era toda lo rica y más de lo que uno podía imaginarse y en mi deleite como un poseso mamón hice sacarle otro polvo mágico, no sé si sus gemidos eran gritos o llantos y a veces repetía que rico que rico que rico!!!

Ahora te toca a vos le dije y me quité desesperadamente mi maya, mi pija le apuntó brillante dura por el líquido semanal, ya por la propia humedad que destilaba mi cuerpo caliente y deseoso. 🤣

Ella se incorporó hasta tenerla frente a sus ojos que se abrieron grandes como no pudiendo creer que esa cosa gruesa y dura podía entrarle en ese agujerito pequeño y rosado que latía entre sus piernas, instintivamente la tomó y rodeó con su mano derecha, la acarició y la estrujó paseándola torpemente, sumó su otra mano y aceleró los movimientos, de golpe abrió la boca y se la metió de golpe, una chupada como cuando uno extrae todo el jugo de una naranja y deja nada más que la pulpa.

Su inexperiencia hacía que miles de sensaciones me electrificaban el cuerpo, si seguía me haría acabar y no quería, todavía no… me costó sacarla, la muy golosa se la quería comer toda… Volví a meterme con mi lengua en su conchita que inundaba de líquidos, la tomé de la cintura y la fui girando hasta ponerla en cuatro, la vista era increíble, tener a mi entera disposición un culito virgen frente a mis ojos, le abrí con mis manos los pliegues le chupé el orto y la concha a la vez.

Jazmín volaba y no dejaba de gemir

La volví a girar y poner boca arriba. Ahora te voy a hacer mía ni amor, te va a doler un poquito pero es normal pero se te va a pasar rápido y te va encantar. 😂

Le apoyé la cabeza en la entrada de su conchita, es muy estrecha, le va a doler, pensé y comencé a besarla, ella contestó con su lengua con una avidez casi animal, no empujaba, solo dejaba que mi tronco se deslizara y resbalara sola, ella por instinto dio un empujón, entró un poquito más, ayy ayy y rápidamente reprimió sus quejas, ahora empujé yo, ayyy ayyy ayyy, ahhhhh algo sentí que cedió y que comenzaba a llorar.

Dejé que solita se fuera enterrando y el dolor se fuera yendo, reculé unos centímetros y ella empujó como para evitar que me saliera .. ya sos mía ni cielo!! Y empecé con un mete saca lento, ella también se empezó a mover…la queres toda adentro mi cielo.

Siii

Pedimelo mi amor.

Dámela toda, ahhhhh

Toma, toma, toma

Les juro qué el ritmo fue increíble, sentía como mi pija era envuelta por sus líquidos calientes, como sus paredes se dilataban disparando vaya uno a saber sustancias mágicas para que ambos bufáramos como bestias salvajes. 😉

Acabó en forma simultánea, yo a duras penas trataba de contenerme, quería más. La hice sentar sobre mi pija, le chupaba las tetas mientras con mis manos le tomaba el ojete, la hundía y la levantaba sobre el pistón a punto de estallar… ¿No podía correr riesgo de embarazarla, aunque todavía no había acabado el riego ya estaba, pero para que forzar la mala? Así que la puse en veinte uñas y empecé a serrucharla, me venía, la saqué y estallé en la puerta de su anillo anal, lo llené de leche, por la espalda otro manchón se extendió a lo largo.

Nunca había acabado de esa forma monumental

Nos acomodamos sobre el colchón inflable en cucharita, mis manos envolvían sus pechitos duros y dulces, no dijimos ni una palabra, nuestras manos hablaban y no dejaban de explorar, nos besamos incontables veces, unos quince minutos y seguíamos igual, mi pija otra vez estaba dura y hambrienta, así de costadito se la volví a poner, entró casi sin esfuerzo. Fue un polvo mucho más corto, pero igual de rico, está vez le acabé en las tetas.

La acompañe al baño y en la ducha la enjabone y sequé. 😊

Yo estaba sentado y me dio el beso de lengua más sensual que me dieron en mi vida, ahhh que ricooo me susurró al oído y volvió corriendo hasta la puerta del baño.

Mi celular comenzó a sonar, atendí .. Sinceramente esperaba noticias feas, pero no, mi cuñado me avisaba que estaban de regreso en media hora, que todos estaban internados con traumatismos y construcciones, que solo ni sobrino estaba con fracturas y que iban a quedar en observación, que por protocolo del covid nadie podía quedarse en el hospital. 😒

Le expliqué la situación a Jazmín y la tranquilicé. Aprovechamos para salir al patio y hablar antes que todos llegaran. Le dije lo hermoso y maravilloso que fue haber hecho todo lo que hicimos, ella me dijo que fue lo más importante que le pasó en su vida, que le encantó y que estaba muy triste porque no habría posibilidad de que nos volviéramos a ver, menos que tuviéramos la oportunidad de hacerlo de nuevo.

Me pasó su contacto y entre el galpón y los árboles nos dimos unos besos, lengüetazos y caricias con la duda de que serían los últimos.

Al rato llegaron todos y no pude evitar el nerviosismo y la ansiedad que me producía recordar detalles de semejante bombón que me comí, era tan evidente que todos pensaban que era por toda la espera sin noticias de la situación del accidente. 😁

Cenamos y evité cruzar mirada con Jazmín, ella parecía más aplomada e hizo que me serenara

Al otro día me levanté temprano y me volví a casa, no quise despedirme de Jazmín frente a todos. 😢

By: Califa