«Ohhhh.. Ohhhhhh… Oumhhhhhh… Oumhhhhhhhh… Ohhhhhhhhh… No…no…no mi amor!! No mi cielo!! Oumhhhhh… Oumhhhhhh… Oughhhhhh
Espera por favor hijo!! Oumhhhhhmm.. Oughhhh….. Detente mi amor!! Detente mi vida…te lo ruego!! Oumhhhh… Soy..soy tu madre mi amor!!…..
Soy tu mami mi amor!! Oumhhhh… Por favor hijito lindo…no sigas..no sigas por favor!! Oumhhhhh… Te lo suplico!! Soy tu madre!! No lo hagas!!..»
Pero los gemidos cachondos y ahogados de mi madre, su voz entrecortada pidiendo que «no lo hiciera» así como su piel erizada, ese estremecimiento que la recorría y sus manos acariciando amorosa mi cara, mientras yo con mi cara hundida entre sus pechos, besando, lamiendo, chupando aquellas ricas tetas maduras, morenas, aguadas, flácidas y arrugadas que fuera de su brassiere colgaban exquisitas, mientras mis manos recorrían sus esbeltos muslos de suave piel, sus costados, acariciandola con deseo, con lujuria, olvidando por instantes que ella es mi madre, que ella es mi mamá y descubriendo que a su edad, que a sus 57 añoso mi querida y adorada madre no esta nada mal, ahora que la tenia con sus tetitas de fuera y las sobaba, las agarraba, las besaba y lamia, las chupaba ansioso, succionando esos pezones duros y bien erguidos, después de besarla, de besarnos en la boca como si fuéramos dos amantes, mas que una madre con su hijo… Pues ni ella, que estaba demasiado vulnerable, que se sentía muy sola y necesitaba con urgencia saberse amada, saberse importante para alguien, ella que extrañaba y necesitaba las caricias, las atenciones de un hombre, y menos yo que después de besar en la boca a mi propia madre, después de probar su boca ansiosa, esa boca maravillosa que tan rico y tan ansioso me había besado, y que ahora el deseo me consumía por estar con ella, a sabiendas que cometer incesto era algo prohibido, pero ya no podía detenerme!! Ya no podía parar después de besar su boca, después de besar su cara y sentirla, percibirla lista como hembra, pues ya no iba a detenerme…¿Quien lo haría?
Mi madre a pesar de sus «negativas» estaba mas receptiva en realidad, esta separada de mi padre, vivimos solos ella y yo…¿Quien iba a detenerme? ¿Quien iba a saber lo que ocurriría?
«Por favor mi amor!! Oumhhhh… Por favor hijo!! No se como paso esto mi vida!! Oumhhhhh… Esto es un error…esto esta mal mi amor!! Ohhhhhhh
Es..es un error mi amor!! Por favor no lo hagamos mas grande…si? Por favor Antonio!! Ahhhhh… Hagamos de cuenta que no paso nada..que esto
No esta pasando..no paso hijo!! Por favor mi amor!! Por favor Antonio!! Yo..yo me siento mal… Esto no es lo que buscaba..yo solo quería platicar
de como me siento mi amor… Ohhhhhh… Perdón si te di a entender otra cosa mi cielo!! Por favor discúlpame hijo, pero no podría mirarte a los ojos
si llegara a pasar algo mas mi amor!! ¿Si me comprendes verdad hijo? Soy tu madre!! Soy una dama mi amor!! Por favor no sigamos…por favor!!..»
Pero les juro que la mirada de mi madre decía otra cosa!! Se veía nerviosa y turbada, pero no apenada, suspiraba mientras acomodaba dentro de su brassiere nuevamente sus pequeñas tetitas y es que mi madre, es una señora bajita, pequeña y flaquita, de aspecto normal para una señora de su edad, su carita de rasgos muy humildes y sus ojitos me decían algo muy distinto a sus palabras, nos habíamos besado en la boca por un impulso natural, un sentimiento de amor, de protección, de cariño sincero mas que de deseo… Mi madre hace un año que se separo de papá y aunque no lo demuestra pues aun no superaba esa perdida, yo vivo con ella desde ese tiempo pues también soy separado, y les juro que hasta antes de besarla en la boca, jamas tuve malos pensamientos hacia mi madre, hacia Juanita que es una mujer recta, seria, algo tímida, una apacible ama de casa…
Le acariciaba la cara de manera amorosa y cariñosa, queriendo transmitirle con ese contacto lo mucho que la amo, peine sus cabellos lacios, largos que yo había soltado y que ahora caían sobre su cara y hombros, le acariciaba las mejillas y su piel suave, tibia y arrugada ya, me enardecía como no se imaginan… Mi madre apenada, abrochaba su blusa nerviosa, con sus dedos temblorosos que no atinaban a abrochar su blusa, por un momento cuando ella me separo de sus senos, cuando acomodo guardando sus tetitas en el brassiere y después de escucharla que no deseaba continuar, pensé en obedecerla, en hacer caso a lo que ella decía, pero al verla tan nerviosa, al verla ahí al lado mio y después de besar su boca, de probar sus tetitas, de acariciar sus piernas, pensé que quizá nunca volvería a tener esa oportunidad… Así que me puse de pie frente a mi madre, que alzo la cara para verme, ahí sentadita en el sofá donde comenzó todo!! Por su cara, por su expresión supe que ella comprendió que no terminaría ahí lo que había comenzado, la mire a los ojos mientras desabrochaba lentamente mis pantalones que caían al suelo, me baje MA truza y la mirada de mi madre, nerviosa, sorprendida siguió mis movimientos, absorta con sus labios entreabiertos y suspirando, jadeando nerviosa, vio saltar mi verga, gruesa, larga, dura, potente que cabeceaba, que palpitaba frente a ella, muy cerca de su rostro!! Vi como la cara, la piel de su rostro cambiaba de colores. Omo abría su boquita en un gesto de sorpresa sin poder evitarlo… Y me miro a los ojos quedándose muy quieta, mientras yo la miraba decidido a no terminar ahí, acaricie su cabeza y la sujete con la mano abierta de manera casi patenal…y acerque su cabeza a mi verga que palpitaba frente a su rostro, mi otra mano sujetaba mi verga de la base del tronco y enardecido pase mi verga por la carita de mi madre, le pase la verga por su boca entreabierta, la deslize por sus temblorosos labios, mientras mi querida madre era incapaz de reaccionar!!
«Tienes razón en todo lo quedices Juanita!! En todo!! Oumhhhh… Ohhhhhh… Pero aquí nadie nos mira!! Nadie va a saber lo que hacemos a solas mamá!
A menos que tu quieras contarles a todos que tu hijo te anda cogiendo!! Ohhhhhh… Que tu hijo te anda metiendo la verga mamita linda!! Ohhhh.. Eres mi
Madre!! Eres mi madre y eso lo se muy bien!! Pero ambos somos libres Juana!! Y no puedes negar que te gusto que nos besáramos en la boca.. Porque
Me besaste con muchas ganas Juanta!! (ya la lenguita de mi madre acariciaba, lamia mi carne mientras yo seguía pasándola por su boquita) Ohhhhhhhh
Ahora mismo mamita!! Mira con que deleite me estas lamiendo la verga!! Eso quiere decir que no te importa para nada hacerlo con tu propio hijo!! O si??
Antes que ser mi madre…eres mujer!! Yuna mujer que necesita esto!! Aun eres atractiva, aun eres joven para esto Juanita!! Oumhhhh…y estas bien rica»
Yo bufaba de placer, sujetando con ambas manos la cabeza de mi madre, conteniéndola por momentos, pues me la mamaba, me la chupaba con unas ganas, con una ansiedad y una desesperación que me hacia desconocerla, ella tan seria, tan modosita, tan apacible y vaya que era tan distinta como mujer!! Mi madre alzaba la mirada, viéndome a los ojos de una manera tan cachonda, tan se Saúl, tan obediente y entregada que me excitaba aun mas!! Sus dedos suaves, tibios, arrugados me sujetaban de la base del tronco jalando mi verga mientras cabeceaba ayudada por mi, engullendo, tragando lo mas que podía mi gruesa, larga y dura verga…
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