En la playa con mi marido

Hola, mi nombre es Francesca y siempre he sido bien puta, desde que tengo uso de razón, mi familia supo cómo darme lo que yo quería, y crecí cogiendo con todos, a veces porque yo quería, otras veces a la fuerza, pero siempre me encantó que me cogieran, tengo unas nalgotas que atraen muchas miradas, y me encanta vestirme bien puta, y tengo un marido que le excita mucho que me cojan como puta entre varios hombres.

Esa vez, mi marido me llevó a coger a la playa y me dijo que me pusiera una bata corta y transparente, cuando llegamos a la playa, mi marido se acostó en el asiento de atrás, con su vergota tan rica y gruesa ya bien dura, y me dijo que le mamara la vergota, porque sabe que me encanta mamar verga, entonces, me pasé para atrás y me dijo que bajara las ventanas, cuando estaba mamando le la vergota, yo estaba empinada encima de mi marido, y después de unos minutos, veo que mi marido estaba viendo para atrás de mí y que con la cabeza decía que sí, cuando sentí varias manos manosear mi culote y me abrían las nalgotas y me pasaban las manos desde mi panocha escurriendo hasta el hoyo de mi culote, yo tenía mis dos piernotas arriba del asiento y por eso estaban batallando. Ando para abrir, me las nalgotas, entonces bajé una pierna y oí que dijeron.

Mira, esta puta le está gustando, y me empezaron a dar de nalgadas y me preguntaban, Te gusta, puta? Y yo no podía decir que sí porque mi marido me estaba cogiendo por la boca, le dije a mi marido, hazte más para acá para abrir la puerta para que me cojan mientras yo te sigo mamando tu vergota, mi marido se recorrió mientras yo abría la puerta del carro y vi que eran 5 hombres, cuando vieron que abrí la puerta, le preguntaron a mi marido, mientras yo me empinaba, qué podemos hacerle a esta puta y mi marido dijo lo que ustedes quieran, tienen ese culote para lo que quieran.

No había terminado mi marido de responder cuando ya tenía una verga muy rica bombeando mi culote y otro metiéndome los dedos en la panochota y dos jalándome las chiches para mamármelas, mi marido dio un gemido y sentí toda su leche recorrer mi garganta, ¡me encanta la leche! El que me estaba cogiendo por mi culote también se vino y me inundó de leche, todavía no me sacaba su vergota cuando ya tenía otra golpeando mi panocha con los huevotes, le dije a mi marido, hayy amor, dejame tener dos vergas adentro de mi culote, y me dijo, si, Mami, lo que tu quieras, y les dije a los hombres, acuéstate uno en el asiento, y cuando se acostó, me quité la bata, senté mi culote y me metí toda su vergota por mi culote, y le dije a otro que me metiera la verga por el culote también, y después de varios intentos, sentí la cabezota entrar y grité, sentí que me partían mi culote, y me dijo, callate, puta, qué bien, que te encanta la verga, y yo grité, siiiii, me encanta, y entonces me metió toda su vergota y empezó.

Arrancaron a sacar y a meterme la verga los dos, y yo le gritaba a mi marido: Hayyyyyy, amor, qué rico, qué rico me están cogiendo, como la puta que soy, verdad que sí, amor, soy bien puta, verdad? Y mi marido me contestaba: por eso me encantas, putaaa, y en eso que me llenan de leche, tuve un orgasmo bien rico cuando sentí que los dos se vinieron hasta adentro de mi culote. Los otros dos que quedaban no desaprovecharon que ya tenía mi culote todo abierto y lleno de leche, y se pusieron a cogerme también, doble por mi culote, para cuando se vinieron, mi marido y los otros 3, ya tenían la verga bien dura otra vez, y mi marido les dijo, vamos a bañar de leche a esta puta, y me entraron la leche en mi cara, mis tetas y mi estómago, yo acostada en el asiento y cubierta de leche.

Mi marido se puso en mi cara y me puso a mamar los huevotes mientras me embarraba la leche por todo mi cuerpo, mientras le mamaba sus huevotes, le pasaba mi lengua por su culo y se le volvió a poner dura la verga y empezó a masturbarse mientras le mamaba su culo y sus huevotes hasta que no aguantó más y me volvió a bañar de leche, así nos quedamos un rato para descansar y me dijo que cuando nos vayamos, vete así encuerada y llena de leche, me encanta verte así, me encantas que seas bien puta, y yo le di un beso y le dije, siempre seré tu puta.

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