El compañerito de trabajo de mi marido

📋 Lecturas: ️16500
⏰ Tiempo estimado de lectura: 20:00 min.

Hola, mi nombre es Daniela soy una mujer ya de 38 años, casada ya más de 20 con mi compañero de toda la vida David un año menor que yo, pero con muchas cosas locas que siempre me proponía y la verdad nunca en mi vida me imaginaría hacer, ya tenemos 3 hijos en estos largos años juntos, una de 20 años otro de 18 y el último de 10.

Como les dije nunca imagine hacer cosas de las cuales, la verdad que no me arrepiento y por lo contrario disfrute muchísimo, mi marido el quien siempre tuvo la mente muy abierta de un momento a otro empezó a confesarme sus fantasías, las cuales eran quererme compartir con otro hombre, al principio me costó asimilar lo que el me pedía, pero tanto fue su morbo y todas las cosas que me decía que accedí en complacer sus locas fantasías.

No niego que lo hicimos en cuatro oportunidades pero con el mismo hombre, cosa que disfruté muchísimo, no se imaginan como me gusto, claro que en la primera vez fue algo incomodo para mi, pero ya en la segunda vez me solté más y dejé la vergüenza de lado por mi marido estando presente, en esas ocasiones lo hacíamos con preservativos, y es que aquel hombre que mi marido llevaba era de tener una verga algo más grande y gruesa que la de él.

Ya en la tercera vez agarrando más confianza no me importaba la presencia de él y era la putita que el quería ver, al punto de quitarle el preservativo y disfrutar al natural tamaña vergota, hasta que en la cuarta vez ya me sentía mujer de el y llegué al punto de que me penetrara por atrás, disfrutando cada pedazo de esa vergota, haciéndome venir en muchas ocasiones.

Llegué al punto de querer volver a repetir esos momentos de placer, no estaba desesperada pero aquella adrenalina que corría por mi cuerpo se hacía extrañar, no fue hasta casi después de un par de meses mientras mi marido me follaba rico y en plena faena mientras me daba duro por mi culito me decía Amor, vamos hacerlo de nuevo, quiero ver como te parten ese rico culo que tienes, quiero verte disfrutar de una buena verga.

Al oír decir eso a mi marido me excitaba más al pensar que nuevamente iba a probar de la verga del amigo de mi marido, eso me puso bien caliente al punto de correrme sin parar, y el seguía calentándome me hablaba y me trataba como una puta, mientras me nalgueaba muy duro, fue cuando mi marido me dice, así amor mueve ese rico culote, quiero verte disfrutar, quiero ver como te montas encima de otra verga, y ves cuando mi marido empieza a llenar mi culito de leche, aaaahhhh empezó a gemir el dejándome toda llena de su leche.

No paraba de moverse pero yo seguía muy arrecha, caliente con ganas de más, quería que mi marido me siguiera dando duro, pero cuando el acabó, fue cuando empezó a conversarme y sin dejar de manosearme me dice: Amor gracias por complacerme en mis fantasías, no sabes como me encantó verte follando con mi amigo, verte así toda suelta, dejando la vergüenza de lado y portándote como la putita que me encanta que seas, pero quiero saber si podrías complacerme en algo que te voy a pedir, la verdad que lo que me propusiera propusiera marido estaría súper encantada de complacerlo, y es que mi cuerpo estaba extrañando esos momentos de adrenalina.

El compañerito de trabajo de mi marido 2

Cuando mi marido me dice: Amor, estarías dispuesta a follar con otro hombre? No oculté mi excitación y ganas de volver a hacerlo, pero al pedirme que lo haga con otro, me causa más excitación y sorpresa, empecé a agarrarle la verga, y le dije, eh, Amor estas seguro de lo que me pides?? Le dije yo, y es cuando me empieza a hablar de un compañero de su trabajo incluso me comento que aquel hombre tenía la verga más grande que la de su otro amigo, y el me dice eso porque en el trabajo allá se bañan y se miran todos las vergas y el me dice que el es el más vergon de todos, eso me calentó más y ya estaba alucinando con el tamaño de esa verga dentro de mi.

Le dije, uy amor que rico, es cuando mi mujer empieza a hablarme de él, y me confiesa que le a enseñado algunas fotos mías, pero sin decirle que era yo, pero le dijo que era de una amiga que se follaba y le pregunté, y que te decía?? Me dijo, que sin dudarlo te cogeria jajajaja, así amor?? Es cuando me dice, sabes amor, el es algo joven, y le dije, de cuantos años?? Será de unos 30 años, y me dice, no Amor, el tiene recién cumplidos 20 años, la verdad que en ese momento lo pensé un poco, porque yo tengo a mis hijos de esa edad, el me mira y me dice, amor, vamos, hay que hacerlo, lo haremos?? la verdad que si lo pensé un poco, pero como les dije, mi cuerpo necesitaba de esa adrenalina, y mas cuando me dijo del tamaño de su verga, le dije que, si lo haríamos.

Él siempre planeaba todo, en donde lo haríamos, ya que lo hacíamos en un hotel con su otro amigo, no saben quería que llegue ese momento, esos días follabamos de lo más rico, pero igual yo sentía la necesidad de tener aquella adrenalina de lo prohibido, a los días mi marido me dice, que ya todo estaba planeado, pero lo que aún no me decia era que quería hacerlo en nuestra propia casa, es cuando le dije, amor estas loco? Como lo vamos hacer acá?? y los chicos?? Y el me dice, tu no te preocupes ya todo esta planeado, ya quede con tus padres que vayan a su casa a quedarse con ellos.

La verdad ni se como le hizo para que sobre todo la mayor acepte, pero me dijo que ya había hablado con ellos, hasta llego aquel día, mi marido me hizo poner el vestido más corto y descarado que tengo, con una diminuta tanguita que me compró, y que me compraba cada que teníamos nuestros encuentros con su otro amigo.

Antes de que el llegue me marido me dice, que el no sabe lo que el a planeado y que solo lo invito a tomarse unos tragos con el, me pidió que lo caliente, que juegue con el, ya que el es super tímido, me pidió que cuando los deje por momentos solos, que lo seduzca y que tenga contacto físico con el, saben, no saben lo caliente que estaba, podía sentir como mi vagina se iba humedeciendo, nunca me imagine acceder a todo esto, a ser una buena madre y ama de casa ante los ojos de todos, pero mi marido sacó de mi lo putita que llevaba por dentro, así que me fui a vestir como me pidió mi marido.

Eran casi las 10 de la noche y no llegaba, ya que habían quedado a las 8 de la noche, tanto el como yo estábamos impacientes, hasta que sonó el timbre, mi marido me dice que aún no salga, anda tomando un poco de vino y que primero lo iba a emborrachar un poco, y que luego le enseñaría fotos mías pero más sugerentes a ver su reacción.

Habría pasado casi una hora, y solo podía verlo de espaldas, sentado allí en el mueble, era más pequeño que mi marido, hasta se le oía tartamudear por momentos, podía ver que en ese momento mi mujer le estaba enseñando las fotos que le enviaba a mi marido, cuando el le dice, wow señor David todo eso se come usted, tiene un culote esa mujer, eh uuufff no sabe como también me gustaría tener ese mujeron, y mi marido le dice, con esa vergota que te manejas si la haces y podrás tener a las mujeres que quieres.

Yo estaba muy caliente, cuando mi marido voltea y me mira, mientras me mordía los labios el se pone de pie y lo deja viendo mis fotos, se me acerca y me dice, ya amor de acá en un rato te acercas y ya sabes que hacer, sedúcelo, juega con el apenas llegues tu ya sabes que hacer, y dije yo, al fin voy a ver a ese chico, estaba deseosa, mi cuerpo empezó sentir aquella adrenalina de calentura, cuando me acerco, y al ver aquella carita me hizo recordar a mi hijo, pero no lo quise ver así.

Fue ese vino que me dio mi marido que me puso más caliente, pero esa carita que tenia se transformo cuando me vio, su mirada se quedó prendida en mis tetas, ya que aquel vestido blanco casi traslúcido hacían ver mis pequeñas tetas y a notar mis marrones pezones, aquella mirada me puso calientísima, no saben cuanto, se puso de pie y me saludo, seño que tal, me llamo a a Andrés, le tome la palabra muy en serio a mi marido y casi le di un beso en la boca, se quedó pasmado y algo asustado miró a mi marido algo avergonzado.

Me senté en el sillón de al frente y el algo tímido y tratando de disimular quería ver entre mis piernas, mi marido le seguía dando de tomar, y ya con la mirada algo perdida ya me miraba ya sin descaro mientras hablaba con mi marido, así que me puse de pie y le dije, oye Andrés tienes casi la edad de mi hijo, te cuento que el me dejo las tetas casi a los 6 años, hasta creo que un poco más, incluso hasta casi los 11 años le gustaba jugar con ellas, y el me dice, jajaja de verdad seño, bueno, cualquiera no dejaría de hacerlo.

La verdad que yo no quitaba la mirada de su bulto, podía notar que estaba efecto, cuando le dije a mi marido, te acuerdas amor cuando me mordía los pezones, y el me dice, si amor, te dejaba hasta marcas en las tetas, no podía resistir más, el climax llego a mil, mi marido me miraba y sabía que estaba deseosa de placer, es cuando, le dije, si, miren como me dejo acá este pezon, mira amor, lo vez, Adres se quedó con la boca abierta tratando de mirar a otro lado, y me acerco a el y le digo, mira Andres, lo notas?? 

Mi marido se acerca y dice, si mira Andrés le dice el, y mi marido me empieza a tocar la teta , y dice, amor no se ve mucho, pero se siente, me mordía los labios mientras miraba aquella carota de chico caliente, y les dije, en la otra se siente más, así así saque la otra teta, y tome la mano de Andrés, y la puse en mi otra teta, yo estaba que no pifia resistirme más quería que aquella boquita se trepe en mis tetas, es cuando mi marido se va, diciendo que va al baño el se fue y me senté al lado de el.

Los tragos le quitaron la timidez a Andrés, agarre sus dos manos y las puse en mis tetas, el las agarraba siempre mirando a la dirección donde se fue mi marido, no resistí más y lleve mu mano hacia su verga, podía sentir lo electa que estaba, agarre su cabeza y las lleve hacia mis tetas, y le dije chúpamelas, seño, su marido no valla a venir, y le dije con voz algo gimeante, no te preocupes por el, chúpamelas.

Estaba caliente a más no poder me puse de pie y me saque el vestido, me monté encima de el y empecé a besarle, mientras me lo comía a besos, me Soñaba por encima de su pantalón, podía sentir su bultote por encima de mi tanguita que estaba mojada, le quite el polo y baje con desesperación hasta su verga, seño seño, no, va a venir el señor David , no le hacía caso, y casi a la fuerza le empecé a quitar el pantalón pantalón sacarle la correa.

Solo quería tener esa verga en mi boca , así con mucho esfuerzo le quite el pantalón y su bóxer, y lo que salió de allí fue algo riquísimo y me quedé impresionada, de como aquel jovencito de 20 añitos delgado podía tener semejante vergota, no les miento pero se la empecé a chupar con desesperación, me la quería tragar toda, me vieran ustedes la manera de como se la chupaba, uumm que rico le decía yo, mientras el andaba preocupado por la llegada de mi marido, le chupaba sus ricos huevos, mi lengua pasaba y pasaba por cada lugar de esa vergota.

Estaba muy dura, me enloquecía por aquella verga de ese jovencito, cuando aparece mi marido, pero Andrés no se dio cuenta en ese momento por disfrutar de súper chupada de verga que le daba, cuando se dio cuenta que mi marido nos miraba, asusto, señor David y es cuando mi marido le dice, sigue papi, disfruta de ella, sabes, las fotos y videos eran de mi mujer, yo no dejaba de mamarle la polla, mientras que mi mujer me pidió que me ponga en 4, y le dice a él, mira, es el mismo culo que te enseñe en fotos y videos, no temas y disfrútala.

Yo seguía moviéndole el culo.

El compañerito de trabajo de mi marido 3

Me saqué la tanguita, que estaba empapado, me subí al mueble mi vagina estaba muy mojada, quería ensartar esa verga dentro de mi vagina, pero marido se nos acerca y me dice, que te coma la concha, coloque en su boca y empecé a sobar mi vagina sobre su carita, sentía que me quería correr estaba a mil, así mi marido le decía a Andrés, dale papi, disfruta de esa concha, chúpasela , métele la lengua, hazla venir.

Así el paso sus manos hasta agarrarse de mi nalgas y empezó a chupármele toda, sentía que quería meterse dentro de mi vagina, lo hacia torpemente pero esa inocencia me ponía más loca, quería que me perfore de una vez, pero lo paré termine de desnudarlo, tome de su vergota y lo lleve a nuestra habitación, donde mi marido me sabe dar duro y como me gusta.

Lo heche en la cama, y podía notar el tamaño de esa vergota, me puse a chupársele, pero ya quería sentir esa vergota dentro de mi, no había necesidad de mojarla ya que yo estaba escurriendo de lo excitada que estaba, así que me monté encima de él, y les digo, a penas sentí la puntita de esa verga, mis piernas empezaron a temblar, poco a poco me la iba metiendo, no podía creer que el grosor de esa verga podía sentirla, podía sentir como se me iba abriendo más la vagina con esa vergota, aaaahhh hasta qje al fin pude sentirla, muy apretada dentro de mi.

No pasó ni un minuto hasta que me hizo venir, nunca antes había tenido un orgasmo tan intenso como ese, me vieran como movía sentí como me entró todita, me puse en las poses que pude, teniendo un y otro orgasmo, quería sentirlo más y más, me tuvo follando así por largo momento, me seguía haciéndole venir mientras que ni marido solo nos observada, mientras se pajeaba, viendo as u actriz porno favorita que es como el me dice.

Me sentía llena de placer, pero, quería sentir esa vergota pero dentro de mi culito, necesitaba sentirla, así me puse de perrito, mientras mi marido abría más mi culo, y le dijo a Andrés, dale chúpale el culo, métele la lengua en ese culote, disfruta a esa puta, decía mi marido, cuando Andrés estaba a punto de meterme su verga por mi culito, mi marido se me acerca y me dice, quiero verte disfrutar putita, quiero ver como te parten el culo, yo mismo tomaré su verga y te la meteré, así mi marido, que a penas podía verlo, estaba metiéndome sus dedos por mi culito, así empezó a colocar la verga de Andrés en la entrada de mi culo, podía sentir como me estaba entrando la cabezota, aaayyyyy que rico, así amor, métemela toda.

Así así así, aaaahhhhh sentía cada milímetro que me estaba entrando, era una sensación de dolor pero más de placer y más aún sabiendo que era mi marido el que estaba tomado la verga de el, sentía que me daba partidos en dos, pero quería sentirla más y más adentro, poco a poco sus movimientos iban en aumento, poco a poco me estaba partiendo mi culito, lo estaba disfrutando, me sentía en un éxtasis total de la era, hasta que me hizo venir una vez más yo misma empecé a mover mi culo.

Estaba muy excitada, quería se tira toda, así que lo quite por un momento y lo tire a la cama, me mente encima de él, metí su vergota en mi vagina lubricándome más y más, el hacía que bote y bote jugos de mi vagina hasta que lo saque de allí, y sin dejar de mirarlo iba metiendo su vergota en mi culo, aaaahhhh aaaaaahhhhh asíiiiii uuummmm asiiii, que rico, me la voy a meter toda si si si, una cosa es que lo es iba y otra de como lo estaba disfrutando.

Ya casi me la estaba metiendo todita, así tire mi cuerpo hacia atrás me puse de cuclillas y ya podía sentir toda su verga en mi culo, aaaaaahhhhh estaba desesperada gimiendo de lo más rico, cuando mi marido sube a la cama y mientras Andrés me partía el culo iba chupandole la verga a mi marido, estaba a punto de explotar de placer, no podía resistir ante tanto situación, y fue que nuevamente empecé a venirme a chorros, al punto de empapar a Andrés yo no dejaba de moverme.

Andrés se puso encima mío poniendo mis piernas a sus hombros y me embestía con brutalidad, sentía que me estaba partiendo el ano, sus embestidas eran cada vez más rápido me estaba dando super duro, aaaahhhh podía podía cómo toda su leche desbordaba por mi culo, podía sentir lo caliente de su leche, hasta podía ver como su verga entraba y salía de mi culo, se veía enorme y venosa.

El no paraba de moverse, seguía dándome duro a pesar de que ya me había llenado de leche, pero yo disfrutaba de la follada que me estaba dando, podía sentir lo dura que seguía mientras no paraba de moverse, mientras mi marido seguía jalándosela, yo sabía que ese jovencito no me iba a dejar y si, el no paraba, seguía embistiéndome y yo seguía disfrutando, no paraba de follarme, yo seguía y seguía, ni el ni queríamos parar.

Seguimos follando un y otra vez, las chupadas de vergas que le hacía, toda esa madrugada me tuvo dándome por mi culo, no había cansancio en ambos hasta mi marido después de tantas pajas se quedó hasta dormido, pero este muchachito me estaba haciendo sentir lo que nunca antes nadie me había hecho sentir.

No les miento que follamos en toda la casa, dejándome llevar por la lujuria y el placer hasta llegar al punto de follar en las habitaciones de mis hijos estaba totalmente descontrolada a causa del placer que me estaba haciendo sentir.

Fue toda una noche follando, quedamos muy cansados y rendidos, incluso nos quedamos dormidos en la habitación de mi hija mayor, cuando siento que mi marido mientras estaba boca abajo me abría mis nalgas deleitándose seguro de como me dejó el culo Andrés, me sentía adolorida pero bien satisfecha, cuando siento que mi marido empieza a penetrarme por mi culito adolorido, mis gemidos empezaron nuevamente mientras mi marido me decía, te gusto amor como ese chiquillo te partió el culo, y le dije, no sabes cuanto amor, te amo, aaahhh aaaahhh aaaahhh así amor tu también lléname de leche le decía a mi marido.

Mi marido me puso de rodillas en la cama y siguió fóllandome el culo, muy cerca mío, la verga de Andrés, viéndola así toda gracias de igual manera de le veía grande, no podía creer que mi culo haya aguantado semejante carne.

Se le veía profundamente dormido, y mi marido seguía caliente y me pide que se la chupe, pero le dije, amor hay que dejarlo descansar, así mi marido siguió dándome por mi culo, pero sin dejar de hacerle  aso, tome su verga y empecé a darle pequeños lengüetazos mientras el seguía profundamente dormido.

Creo que esta noche nunca lo podre olvidar, amo como no se imaginan a mi marido, pero este chico me hizo sentir algo que nunca había sentido, no se que esto se volverá a repetir pero si llega a suceder se los volveré a contar.

Compartir en tu redes !!
Daniela
Daniela
Relatos: 1