A escondidas con el amigo de mi ex – I, II
Primera Parte
Cómo les platicaba en un relato anterior, tanto en este sitio como en otros donde compartimos fotos, ambos manejamos las cuentas y estamos al tanto de los relatos y fotos que subimos cada uno, como parte de la fantasía ya comentada de mi esposo y ahora se podria decir que también mia, hemos platicado sobre situaciones que vivimos en noviazgos y relaciones anteriores, antes de que juzguen les diré que ambos somos de los que pensamos como se dice por ahí “lo que no fue en tu año, no te hace daño” así que platicando con mi esposo lo que me pasó en un noviazgo que tuve en la juventud me dijo que me animará a contarla.
Todo empezó cuando tenía 18 años me hice novia de un chico 4 años mayor, a mi edad no estaba tan tonta pero comparada con él era una pollita, ya conocía lo que era fajar porque había tenido novios anteriormente pero eran de mi edad cuando estaba en la secundaria, con los cuales a lo más que llegué fueron a los besos, fajes intensos y por ahí uno que otro oral. Obviamente con este novio empecé mi vida sexual imagínense yo 18 años y él 22, por cierto por la diferencia de edad y en ese momento siendo aún una mocosa era una relación que mis padres no iban a aceptar, pero aprovechando que de cierta forma mis padres no eran tan estrictos con mis salidas a la calle pues siempre estaban los pretextos de salir con mis amigas, así que nos veíamos a escondidas ya fuese en su casa o rolando en auto con algunos de sus amigos, nuestro noviazgo se podría decir que fue bueno hasta el año y medio aproximadamente, enamorada de él y siendo fiel, hasta que un día descubrí que se veía a escondidas con otra chica 1 año menor que yo, se la perdone y lo deje pasar confiando en sus palabras, sin saber que lo único que hizo fue ser más cuidadoso, hasta que una noche rolando con mis amigas lo vi entrando a escondidas a la casa de aquella chica, discutimos y su decisión fue terminar nuestra relación para empezar una con ella, eso me dolió mucho porque quién sabe por cuánto tiempo habían estado saliendo a escondidas y todavía termino por elegirla, luego de eso paso lo siguiente..
Terminamos la relación a finales de noviembre, pasé algunos días tristes, salí con mis amistades tratando de despejar un poco la mente y pues al final de cuentas la vida sigue, luego vinieron las vacaciones de diciembre, algunas fiestas, teníamos amistades en común así que de repente me lo topaba, nos saludabamos pero hasta ahí, en teoría no había quedado rencor, sus amigos me seguían saludando, habia uno en especial al cual llamaré “C” que no es que me gustará tanto (de cara) mi ex era más guapo, pero del físico (cuerpo) medio me llamaba la atención era el típico chico que llegaba al gym, todo lo contrario de mi ex que jugaba fútbol y con eso le bastaba para mantenerse en forma. Entonces una madrugada que andaban tomando mi ex con sus amigos incluyendo a “C”, estaba en mi cuarto despierta en Facebook me llegó un inbox de “C” donde me decía que le gustaba mucho desde tiempo atrás pero que por respeto a mi ex no se había atrevido a decirme nada (aunque de cierta forma de todos los amigos de mi ex habían 2 que siempre le daban like a mis fotos y uno de ellos era él) que si se atrevía en ese momento no era por el alcohol, si no que platicando con mi ex pues les había dado a entender que no tenía pensado regresar conmigo y eso para él de cierta forma era como no fallarle a su amistad ya que yo no estaría más en su vida, lo tome a relajo y pensé que posiblemente era mi ex quien estaba chingando o que me andaba calando para ver mi reacción o que quizás el alcohol le había dado valor, porque al fin de cuentas de ese grupo de amigos (unos 10 aproximadamente) 3 incluyéndolo eran como que los mejores amigos de mi ex así que nunca pensé que se atreviera a una “traición” así.
Me quedé con la intriga y curiosidad de saber que tan cierto era lo que me había dicho pero no sería yo quien lo hablaría, entonces a los 2 días me volvió a escribir para decirme otra vez lo mismo, que le gustaba y pidiéndome una oportunidad para salir pero a escondidas porque conociendo a mi ex sabía que si se enteraba tendría que venir algún reclamo, no lo niego que al escribirme con “C” me daba una sensación de nervios como cuando empiezas a tratarte con alguien pero también algo en mi cabeza me decía que era el momento de vengarme, pero era como una venganza para calmar mi dolor o decepción porque al final de cuentas tampoco quería que se enterar ya que en el fondo de mi corazón aún deseaba regresar con él. Platicamos por varios días, empezamos a ver la forma de vernos y que no sospecharan de su ausencia porque siempre andaban juntos ya fuese para tomar, salir o juntarse para pasar el rato, “C” me dijo que tendría que contárselo a “D” era otro amigo de ellos con el cual tenía más años de amistad para así poderlo usar de pretexto, entonces tuve que contárselo a mi amiga que llamaré “S” para que me hiciera el pare y así prácticamente salíamos en parejas, empezamos a salir los 4, a veces nos citabamos en otro municipio cercano a dónde vivíamos pero donde no éramos conocidos, otras veces ellos pasaban por nosotras a cierto lugares donde no fuese tan transitado para evitar que nos descubrieran y nos íbamos a rolar a otros lugares, como se podrán imaginar al principio ya fuese por quererme vengar o porque me sentía atraída por su físico, cada que me abrazaba o nos dábamos besos sentía esos nervios que hay al principio de un relación, así estuvimos saliendo por algunas semanas, y de aquellos besos y abrazos (me gustaba estar entre sus brazos) fuimos pasando a más cosas y para colmo también “S” (que por cierto tenía novio) y “D” (estaba soltero) empezaron a tener una relación como la de nosotros, salíamos a escondidas por las diferentes circunstancias que teníamos cada 1 de los 4, rolabamos por otros lugares lejanos de nuestro municipio, ya saben los tragos, la atracción, los abrazos, besos, la adrenalina de hacer algo prohibido, etc, una buena combinación para seguir con las aventuras.
Un día decidimos ir a la playa, nos fuimos un atardecer, nos llegó la noche al calor de los tragos, de la calentura y estando a solas en la playa nos fuimos a meter a la camioneta en la cual salíamos a rolar (era una camioneta tipo mini van, con asientos y lugar espacioso atrás, era del papá de “D”) entonces “D” y “S” se quedaron en la parte de adelante mientras yo con “C” nos íbamos a la parte trasera y cada pareja en lo suyo, los besos excitantes, el manoseo y un buen faje. Estando con “C” en pleno faje me quitó la blusa y el brasier, moría de pena porque estaban “S” y “D” y hasta ese día nunca me había exhibido a tal grado, de repente veo a mi amiga sin blusa, sin brasier y veo que “D” estaba chupando sus senos, me dio un poco de valor y confianza para seguir en lo mío con “C”, con mis senos al descubierto y él dándose un agasajo, me besaba y chupaba los senos, cuando se dirigía a mi boca para besarme agarraba con sus manos y me los masajeaba.
Luego metió su mano bajo mi shorts buscando mi vagina la cual logró tocar y que para ese momento ya estaba bien mojadita, cuando de repente escucho a “S” decir “no sigas, detente, no puedo” le había dado un ataque de remordimiento pensando en su novio, así que eso hizo que nos detuviéramos, hasta ahí quedaba esa noche, nos regresamos a nuestras casas, platique con mi amiga logré calmarla, ya estando en mi casa me puse a platicar con “C” recordando lo que estábamos haciendo y con las ganas que nos habíamos quedado de algo más, así que acordamos salir al día siguiente pero solos, toda esa noche me la pasé pensando en aquel faje tan intenso y en las ganas que me habían quedado de estar con él haciendo algo más, de no ser por mi amiga tal vez hubiésemos terminado cogiendo ahí en la camioneta.
Al día siguiente era domingo habíamos acordado que lo vería en la capital del estado que está a unos 40 minutos de dónde vivimos, “C” se iría en transporte (ya que no tenía auto, por eso había involucrado a “D” por los pares para salir en su camioneta) ese día le preste el carro a mi mamá para poder pasar por él e irnos a un motel, y así fue, lo pase a buscar, nos fuimos directo al motel y empezamos a quitarnos todas las ganas que nos teníamos guardadas, estando ahí en la cama le quite el pantalón, el boxer y por primera vez lograba ver su pene (solo lo había tocado por encima del pantalón) era el tercer pene que veía en toda mi vida (en vivo, no videos o fotos ) y esta vez no habría nada que impidiera qué fuese el segundo que tendría dentro de mi vagina, real cuando lo vi note que era un poco más grande y ancho que el de mi ex (a mi ex le media 14.5 cm de largo) le sacaba a simple vista unos 2 cm de largo pero de grueso si se notaba un poco más la diferencia, me dije es el momento, ya no sabía si era por venganza o por gusto pero estaba ahí con su pene en mi mano apunto de llevarlo a mi boca y por mi mente lo único que pasó fue disfrutar el momento, me lo estaba saboreando, entonces agarré su pene y comencé a recorrer con mi lengua y labios desde la punta de su pene hasta sus testículos una y otra vez.
Asi estuve por varios minutos, realmente me lo estaba disfrutando, meterme la cabeza de su pene en mi boca y jugarla con mi lengua, recorrer su grueso pene y llegar a sus testículos con mis labios y lengua para succionarlos, después él me desnudo todita y empezó a recorrer todo mi cuerpo con su lengua y termino en mi vagina haciéndome un rico oral dejándome lista para ser penetrada, agarro me pidió que le volviera a comer su pene para dejarlo en su punto, luego se puso el condón y se dirigió a mi, estaba acostada boca arriba, abrí mis piernas, él con una mano ayudaba a abrirme aun más mientras que con la otra mano iba ayudando a su pene a penetrar mi estrecha vagina, rápido sentí ese grosor como iba abriendo y entrando a mi vagina, esa fricción de verdad que fue muy excitante, empecé a gemir, a pesar de que con mi ex había cogido en muchas posiciones diferentes y con muchos juegos previos, no se si por la adrenalina de ser algo prohibido pero esa cogida la estaba sintiendo diferente y mi vagina estaba aún más húmeda que cuando lo hacía con mi ex, así me tuvo cogiendo por un buen rato, luego lo monte y me lo cogí con ganas, lo hice venirse, se quitó el condón descansamos un rato, volvimos a empezar, se puso otro condón y repetimos las posiciones pero ahora en el sillón multiposicional hasta volver a terminar, de repente acostados en la cama nos empezamos a abrazar y darnos besitos nos volvimos a calentar de nuevo.
Me baje a su pene para hacerle otro oral, me dijo que esa pose en la que estaba (en 4 empinada) y la cual veía por el espejo del techo del cuarto lo calentaba mucho y ahí nos dimos cuenta que ya no había otro condón, me preguntó si podía penetrarme así y le dije que no, pero no se quedó con esas ganas y me empezó a calentar de más con un oral y comiéndose todito mi cuerpo entonces por mi mente pasó un “ni modo, me arriesgo y que pase lo que tenga que pasar”, le dije que si pero que no se viniera dentro de mi, agarro me puso en 4 se colocó atrás de mi y empezó a penetrarme despacio, dios que rico sentía esa penetración, sentía como su grosor me iba abriendo y me hacía sentir de los más rico, me estuvo dando hasta que no aguanto más y se vino dentro de mi, ya para ese momento estaba tan caliente que no me importó, después de terminar nos metimos a bañar, platicamos un rato y nos volvimos a dar un buen faje, salimos del motel lo lleve cerca de la parada del trasporte publico para que regresara a casa y yo me me regrese, llegando fui con mi amiga le platique lo sucedido, con lujos de detalle, ya saben las pláticas entre amigas sobre temas de ese tipo, al fin de cuentas eso sirvió para lo que contaré en el próximo relato (segunda parte), de lo que pasó después de ese día, algunos encuentros más y como termino todo esto.
Segunda Parte
Cómo les platicaba anteriormente después de contarle con lujo de detalles a mi amiga lo que había pasado en el motel con “C” ella como que agarro un poco de confianza y ánimo, como había tenido algunos problemas con su novio por otras situaciones terminó por agarrar valor para volver a salir con nosotros y obviamente con “D”.
Toda esa semana estuve platicando con “C” ya que por ciertas circunstancias no nos habíamos podido ver, me pedía repetir la ida al motel pero le dije que fuéramos con calma, me estuvo pidiendo fotos sexys al igual que ese día en el motel quería tomarme fotos pero le dije que no, aún no tenía esa confianza con él y que bueno que no se las mandé ni me deje tomar fotos (al final sabrán porque), después tuvimos otras salidas por ahí a rolar sin pasar a cosas mayores que los besos y fajes, hasta que un día aprovechando que los papás y hermanos de “D” habían salido de viaje y tendría su casa sola todo un fin de semana y como tenía alberca quedamos en pasar un día juntos en la alberca con sus respectivos tragos y botana, ese día yo pedí permiso para quedarme a dormir en casa de “S” y ella pidió permiso para quedarse a dormir en mi casa así que teníamos libre algunas horas para estar juntos.
Ya estando en la alberca los chicos con su respectivo shorts y nosotras en bikini, no soy de creerme ni alabarme tanto aunque se perfectamente con lo que cuento (y contaba en ese momento), en ese tiempo éramos unas jovencitas de 18 años con bonito cuerpo, llegábamos al gym de vez en cuando, mi amiga era flaca pero con unos senos más grandes que los míos y bonitas nalgas, yo tenía bonitas piernas, era algo nalgoncita y de senos normales (ni chicos, ni grandes) usábamos ese día unos bikinis de 2 piezas sexys que a mí por estar un poco más nalgona se me metía entre mis nalgas, los chicos entre más tomaban más se iban calentando y con la confianza de estar solos a cada rato nos daban nuestras nalgadas y manoseadas, sus respectivos besos y fajes sin llegar a más por el momento porque queríamos disfrutar de la estancia en la alberca.
Llegó el atardecer, nos bañamos y pedimos cena, luego nos metimos al cuarto de “D” para ver una película, estábamos acostados, de repente “D” fue por un colchón al cuarto de su hermano con la excusa que para estar más cómodos cada pareja estuviera en uno, veíamos una película cuando comenzamos con los besos y fajes, cada vez más calientes, el toqueteo cada vez más intenso, su mano venció el botón de mi shorts y paso por debajo de mi tanga, sus dedos tocaron mi vagina húmeda y de repente ya había uno dentro de mi, le dije que parara me daba pena porque estábamos acompañados, me dijo que aquellos también están en lo mismo, por la calentura del momento no había escuchado ni un ruido o tal vez mi amiga pensando lo mismo que yo se había aguantado los gemidos, estaban tapados totalmente por una sábana pero se observaban sus movimientos, entonces agarre un poco de confianza y se me fue un poco la timidez nos tapamos con el edredón, termino por quitarme el shorts me dejó en ropa interior y comenzó a hacerme un oral, luego yo a él pero como estaba algo cohibida fue algo rápido nada que ver con lo que le había hecho aquella vez en el motel, entonces escuchamos que “D” abrió un cajón y dijo “chicos ahí hay condones, por si necesitan” todos pegamos unas carcajadas, “C” dijo “apoco van a coger chamacos, no nos van a dejar ver la película” a lo que amiga contesto “seguramente estan viendo la película bajo el edredón”, a mi no me quedo más que reir y decir “pues bueno cada quien en su colchón y usen condones”.
Seguimos en lo que nos habíamos quedado, se puso el condón y se metió bajo el edredón, abrió mis piernas, hizo mi tanga a un lado y me fue penetrando poco a poco, sentí su pene forzando mi vagina para entrar, tuve que morder mis labios para ahogar mis gemidos, de repente agarró un poco más de ritmo sin llegar hacer un ritmo normal porque estábamos bajo el edredón y yo ahí toda excitada, caliente y bien mojada seguía ahogando mis gemidos por pena de ser escuchada por los chicos sin embargo se alcanzaban a escuchar bajito, de repente paro y me preguntó al oído ¿escuchas? nos quedamos en silencio tratando de poner atención, cuando comencé a escuchar unos pequeños gemidos de mi amiga quizás tratando de aguantarse para no ser escuchada, cuando vimos que ella se paró y se montó sobre él y empezó a cabalgar, entonces ya no pudo contener más sus gemidos y fueron más notorios, sin verla coger porque estaban tapados pero al escucharla gemir me dio un morbo y me excité mucho, entonces agarré y le hice un rico oral a “C” como el del día del motel, mi lengua y labios recorrían de arriba a bajo, desde la cabeza de su pene hasta sus testículos, lo monte y me lo cogí por la pena trataba de aguantarme los gemidos pero se escapaban uno que otro. Así estuvimos toda la noche, fueron unas buenas cogidas, bien disfrutadas pero diferentes, al hacerlo lento por la pena de ser escuchados por los otros pero a la vez esa misma excitación por la morbosidad de ser visto y escuchados por otros y de saber que en el mismo cuarto había otra pareja cogiendo.
Después de esa noche tan intensa pasaron algunos días en los que nos seguíamos viendo a escondidas los 4, pero algo más tranquilo, saliendo nomás a rolar o a cenar, con sus respectivos besos y fajes, hasta que un día decidimos ir a la playa tal vez con la intención de acabar lo que la primera vez no se había podido hacer, esa noche volvimos a terminar en la camioneta “D” y “S” adelante y nosotros atrás, me senté sobre sus piernas (como si lo fuese a cabalgar) más besos y fajes, nos calentamos al máximo, mis senos al descubierto otra vez siendo devorados por “C” de repente me pongo de rodillas y él ahí sentado, le empiezo hacer un oral a como le gustaba y a como me gustaba disfrutar de su pene, se puso el condón, cargaba una faldita me quite la tanga que llevaba puesta y me fui sentando sobre su pene, metiéndolo poco a poco en mi vagina y así fui agarrando ritmo hasta llegar al indicado, a mis espaldas estaban “S” y “D” en lo mismo, escuchaba sus gemidos y eso en lo personal me excitaba más, de ahí me pare para cambiar de posición aproveche para voltear a ver a mi amiga y vi que estaba montada sobre “D” le vi su cara de excitada y vi como le rebotaban sus senos, él me pidió que me pusiera en 4 y empezó a cogerme, en esa posición sentía más la fricción de su pene y por lo tanto me hacía gemir más, terminamos de coger esa noche y nos regresamos a nuestras casas, fue la últimas vez que salimos los 4 juntos, ya que el novio de “S” empezó a salir y a compartir más tiempo con ella.
Unos días después mi ex terminó con aquella chica y empezó a buscarme, a pesar de todo seguía enamorada de él así que le dije a “C” que no volveríamos a vernos, deje de contestarle y dejó de buscarme, hasta que un día ya siendo novia otra vez de su amigo, me escribió y me dijo que por lo menos estuviéramos unas vez más juntos, que quería una despedida bien y que no aceptaba un no por respuesta, había terminado por obsesionarse conmigo y me amenazó con hacer que mi novio se enterará de todo, mi error fue aceptar su propuesta no se si por miedo a qué le contara a mi novio o porque quería estar con él y disfrutarlo una vez más. Una noche pase a buscarlo a su casa y nos fuimos al motel, trato de convencerme pero yo ya estaba decidida a seguir con mi novio, le dije que disfrutara, que sería la última vez y que no aceptaría más amenazas, hicimos los mismos “juegos”, me comió, me lo comí a como nos gustaba, entonces me cogió no se si con odio por ser la última vez, pero fue diferente a las anteriores, está vez fue un sexo duro, salvaje, me penetraba sin piedad, realmente lo está disfrutando, gemía como loca en cada embestida, sacaba prácticamente todo su pene y me volvía a penetrar con fuerzas, su pene grueso y mi vagina estrecha me hacía estremecer, sentía un poco de dolor pero al mismo tiempo me gustaba, esa noche literal me trató como una puta y yo lo disfruté, al final como despedida me pidio 2 cosas, una era echarme su semen en mi cara y la otra era venirse en mi boca y que me comiera su semen, lo pensé pero me excitó la idea y terminé por hacerlo, después de esa noche dejó de escribirme pero por ser amigo de mi novio nos seguíamos topando en reuniones y en salidas, fue algo incómodo después de todo lo que habíamos hecho en unos meses y luego actuar como si no hubiese pasado nada.
Pasaron como 2 meses hasta que una noche me volvió a escribir pero le dije que había sido clara con él y no se volvería a repetir nada de lo nuestro. Me lo tope un día, pero esa ocasión me vio platicando con un amigo y se le hizo fácil irle a contar y echarle carreta a mi novio, aprovechándose de la confianza que le tenía le empezó a meter ideas y este a su vez empezó con los reclamos y celos, cuando le pregunté que de dónde sacaba tanta tonterías fue directo conmigo (él siempre fue o es directo en decir las cosas) y me dijo que “C” le había dicho que me había visto con la persona de la cual me reclamaba haciéndonos cariñitos que no eran normales en una relación de amistad, llegó el punto en qué no soporte más, no aguantaría un reclamo más por alguien con el que no tenía nada que ver del cual solo tenía su amistad, cometí el error de no contenerme porque ya sabía las intenciones de “C” y que aprovechando de la confianza que le tenía mi novio le llenaba la mente de tonterías, así que solo le dije “deberías poner más atención a tus disque amigos, a lo mejor lo que pasa es que “C” está celoso y quiere libre el camino para ocupar tu lugar” no se de donde agarre valor pero ya estaba dicho y hecho, él me volteo a ver y me preguntó porque había dicho eso, aunque en el fondo creo que él sabía que había algo más turbio, me fue a dejar a mi casa, andaba con el diablo adentro, no sabía que pasaría pero tendría que afrontar lo que siguiera.
Luego se fue a platicar con “C” y le dijo lo que yo le había dicho y le pidió una explicación a eso, no se si “C” sabía que con esa duda no se lo quitaría de encima hasta saber la verdad (yo también sabía que así sería) entonces quiso lavarse las manos y se le hizo fácil decir “preguntale a ella, porque piensa eso, preguntale porque me da toques en Facebook, porque me estuvo buscando todo esté tiempo que no fueron nada” entonces creo que mi novio fue cuadrando todos los detalles y se dio cuenta de todas veces que “C” no salía con ellos, al final me reclamó le conté la verdad a medías tratando de salvar nuestro relación, le dije que había salido con “C” algunas veces por vengarme de él porque estaba dolida por lo que me había hecho y que si hubieron besos y uno que otro faje, no me atreví a decirle que habíamos cogido varias veces y todo lo demás, termino por mandarme a la chingada, también termino su amistad con “C” y “D”, luego “C” me volvió a buscar pensando que lo aceptaría al estar ya sola y ellos sin su amistad, recibió un rotundo “no, vete a la chingada no me vuelvas a buscar, eres un poco hombre sin valor”, y es así como termina este relato.
¿Te gustó este relato? descubre más relatos eróticos nuevos en nuestra página principal.
A esperas del segundo relato estuvo bueno y riko