Recuerdos con mi hermana dormida
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Por aquella época yo tenía 18 años y mi hermana 27. Acababa de sacarme el carnet de conducir y comprarme un coche de segunda mano, gracias a mi trabajo.
Era verano. Un día, mi hermana perdió el autobús que la llevaba al pueblo donde trabajaba y como mi cuñado estaba trabajando, me pidió el favor de si podía llevarla. Como trabajaba en una casa cuna y ese día le tocaba de noche, y yo estaba de vacaciones, me dio las llaves del piso que había comprado junto con mi cuñado, en el mismo pueblo donde trabajaba, para casarse, para que no volviese tan tarde a la ciudad. Me fui al piso de mi hermana después de dejarla en el trabajo. Cuando entré, puse la tv a ver que había, y como estaba solo puse el canal porno. La peli, aunque follaban a destajo, era un royo y busqué en los DVDs que tenía mi hermana.
En un rincón escondido, vi uno que ponía Porno, y aunque tenía la peli del canal, me entró la curiosidad, pues la letra era de mi cuñado. Mi sorpresa fue cuando lo puse y vi que eran videos y fotos de mi hermana follando con mi cuñado. Mi polla se puso como una estaca al ver las fotos de mi hermana en la cama, abierta de piernas y con su coño peludo a la vista y sus labios vaginales separados, enseñando el clítoris y la entrada de su coño y sus grandes tetas con dos aureolas sonrosadas y coronadas con unos duros y deliciosos pezones, aunque ya había disfrutado de ella al natural. Me fui al servicio a hacerme una buena paja pensando en mi hermana.
Me quedé dormido sobre las 2:00 de la madrugada en el sofá cama del salón. Mi hermana llegó al piso sobre las 8:30, llamando a la puerta pues me dio las llaves. Me levanté y fui a abrirle.
.- Buenos días, niño… Me saludó dándome un beso en la mejilla… Perdona, pero me he dejado la copia de las llaves en casa. No me acordé que me traías tú.
.- Buenos días… Contesté… No pasa nada. me visto y te llevo a casa.
.- No hace falta… Comenzó a explicar mi hermana… Una de las compañeras ha pedido la baja por maternidad y tengo que suplirla esta tarde, por lo que no puedo volver a casa.
.- Ah, vale… Comenté… No te preocupes, nos quedamos y luego te llevo al trabajo.
.- Como quieras… Contestó mi hermana… Me voy a dar una ducha y a descansar un rato.
.- Vale… Contesté… Yo me volveré a acostar, luego llamaré a casa para decirle a mamá que no vamos.
.- Muy bien… Contestó mi hermana.
Ella se fue a la ducha y yo me acosté otro rato. Sobre las 10:00 me desperté y fui al servicio. Desde la puerta, que estaba frente a la habitación de mi hermana, vi como estaba dormida en ropa interior, pues no trajo ropa de recambio. Fui al salón y llamé a mi madre para comentarle el cambio de planes de mi hermana. Después de colgar, volví a la habitación de mi hermana. Seguía dormida y boca arriba. La TV estaba puesta por lo que podía verla bien por la claridad de la TV. Estaba deliciosa, con sus braguitas transparentes, que se le notaba el triángulo negro de su entrepierna y sus grandes tetas con sus deliciosos pezones.
Muy despacio, me acerqué al lado de la cama. Noté como roncaba y me decidí a tocarle las tetas por encima del sujetador. Se lo subí y dejé las tetas al aire. Que buena vista la de sus tetas desnudas con sus aureolas coronadas por dos deliciosos pezones. Me incliné y comencé a pasarle la lengua, haciendo círculos en las aureolas y notando como se ponían duros los pezones. Después de lamerlos, comencé a mamar de ellos suavemente, dándole dulces mordisquitos con mis labios, mientras acariciaba su coño por encima de las braguitas. Metí la mano por el elástico y se me enredaron los pelillos en los dedos mientras buscaba los labios vaginales. Le bajé las braguitas hasta los muslos y dejé a mi hermana desnuda, con las braguitas bajadas y el sujetador subido. Desde las tetas hasta su coño, no hubo un centímetro de piel que no besara o lamiera, hasta llegar a su clítoris y jugar con mi lengua en él. Me coloqué encima de ella y apuntando a su coño, la penetré despacio hasta tener casi media polla dentro. Como no reaccionaba, seguí empujando hasta que sentí como mis huevos tocaban su piel.
Comencé un suave bombeo, mientras seguía mamando y chupando sus pezones. Cuando noté que me iba a correr, saqué mi polla y solté toda mi lefa en su vientre, la cual limpié con un pañuelo de papel. Después de observarla un rato, la vestí y me fui al salón.
Sobre las 13:30, más o menos, se levantó mi hermana, apareciendo en el salón con la ropa interior.
.- Buenas tardes… Saludó… Me visto y vamos al bar de la esquina a almorzar y luego me llevas al trabajo.
.- Buenas tardes… Saludé, mientras no dejaba de mirar su entrepierna… Vale, me visto en un minuto y nos vamos.
.- Vale… Contestó… Yo también voy a vestirme.
Una vez vestidos, bajamos al bar, después de almorzar, la llevé al trabajo.
.- Se me olvidó decirte, niño… Comenzó a explicar… Salgo de trabajar a las 22:00, no te vayas a casa y me esperas en el piso.
.- Vale… Contesté… Volveré a llamar a casa cuando llegue al piso y le comento el tema.
La dejé en el trabajo y volví al piso. Viví a poner el DVD de mi hermana desnuda, pasando las fotos donde aparecía mi cuñado. Me hice una paja pensando en mi hermana. Me quedé dormido sobre las 15:30. Me desperté sobre las 19:00, y aún estaba la foto de mi hermana desnuda sobre la cama en posición de perrito y con su culo esperando una polla. Quité el DVD y volví a ponerlo en el rincón escondido. Sobre las 21:30 Bajé al bar a tomar una cerveza y esperar a mi hermana, pues me dijo que no fuera a recogerla. A las 22:10, llegó mi hermana, pues la trajo una compañera. Después de tomar unas cervezas los tres, la compañera se fue y nosotros subimos al piso.
.- Voy a ducharme… Comentó mi hermana… Ahora hablamos.
.- Vale… Contesté… Veré le tele mientras.
Mi hermana se fue a duchar y yo me quedé en el salón viendo la TV. Al rato, salió mi hermana del baño tapada solo con la toalla, que le cubría muy poco de su cuerpo, por arriba, pues se le notaba el canalillo de las tetas y muy poco por debajo, que casi se le veía el coño al sentarse.
.- Mañana me toca de mañana… Comenzó a explicar… Hoy era mi día de descanso para el cambio de turno, pero tuve que suplir la baja de mi compañera, por lo que, si no te parece mal, tendremos que pasar la noche aquí.
.- Por mí no hay problema… Contesté… Yo estoy de vacaciones y no tengo planes para mañana.
.- Bueno, en ese caso, cenamos abajo y nos quedamos aquí… Expresó mi hermana… Mañana ya vemos lo que hacemos.
Mi hermana fue a vestirse y bajamos a cenar al bar. Compramos una botella de ron y una Coca-Cola y subimos al piso. Después de unos cubatas, mi hermana se fue a dormir a su habitación y yo me quedé en el sofá cama del salón. Esperé un buen rato y muy despacio me acerqué a la habitación de mi hermana. Estaba como la vez anterior, dormida en ropa interior, pero esta vez de lado, en posición fetal. Me acerqué a la cama despacio y al notar que roncaba, comencé a acariciarle el culo por encima de la braguita y las tetas por encima del sujetador.
Poco a poco busqué el elástico y comencé a bajarle las braguitas dejando su culo desnudo. Me tumbé a su lado y bajándome mis boxes, le pasaba la polla una y otra vez por la raja del culo. Las separé un poco y dejando su coño a la vista apunté con mi polla y la penetré suavemente hasta el fondo. Comencé un bombeo, mientras le subía el sujetador y jugaba con sus tetas. En un momento dado se movió, colocándose boca abajo y saliéndose mi polla del coño. Esperé otro poco, por si despertaba y separándole las piernas, volví a penetrarle el coño, mientras acariciaba su culo. Después de un buen rato de bombeo, saqué mi polla y le solté toda la leche en la raja del culo. Fui al servicio por un poco de papel higiénico para limpiarla. La vestí y volví al salón a dormir.
A la mañana siguiente, mi hermana se fue a trabajar y yo a mi casa, pues la recogía mi cuñado que ya empezaba las vacaciones
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