Le puse los cuernos a mi marido y a él le encantó

📋 Lecturas: ️
⏰ Tiempo estimado de lectura: min.

Buenas, permitirme que me presente, mi nombre es cristina y soy la mujer de raúl, claro, ustedes dirán y quién narices es raúl, pero si les dijera baguira1955, seguramente ya saben a quien me refiero, él publico un escrito en el que contaba, que me pilló poniéndole los cuernos con un hombre, no lo voy a negar, si es verdad que tuve un amante y que me folló muchas veces, así que personalmente no se a cual de las veces se referiría el cabrón de mi marido, lo de cabrón no es un insulto es una realidad, el explica una postura, eso tampoco me da muchas pistas ya que me folló de muchas formas diferentes, y que fue en nuestra casa, tampoco me dice nada, ya que allí también estuve con él en unas cuantas ocasiones.

tengo que decir que aquel hombre que claro mi marido no conocía se llama antonio, y era un compañero de trabajo, tengo que decir que amo a mi marido, a aquel hombre no le amaba, pero si en realidad estaba encoñada con él, con mi marido gozaba, pero antonio me elevaba al séptimo cielo, me hacía perder el sentido, jamás nadie me ha hecho gozar como antonio, si es verdad que su polla era mas gorda que la de mi marido, tenia el capullo al aire, un capullo gordo y sonrosado, que resaltaba en la punta casi como una pelota de tenis, que continuaba con una larga y dura polla, que cuando me entraba, me sentía completamente llena, era capaz de bombearme sin parar mas de una hora y encima podía correrse cuatro o cinco veces y en unas cantidades exageradas, el único inconveniente que tenía era que al principio nada mas empezar con el magreo, se corría en seguida, solamente con rozarle, luego podía seguir sin problemas durante todo el día, recuerdo la primera vez que me la metí en la boca, no me dio tiempo ni a pensar cuando sentí su caliente lefa llenármela sin parar, que si no abro la boca para soltar todo aquello, me hubiera atragantado.

como bien dice mi marido en otro de sus escritos todo tiene su principio y el liarme yo con antonio también lo tuvo. me casé con raúl muy joven, ya que me quedé embarazada, teníamos diecisiete años, la verdad mi marido no fue el primer hombre con quien estuve, fui desvirgada con quince años, por un tío que no me hizo sentir solo dolor y nada de placer, fue solo una vez y durante un tiempo se me quitaron las ganas de volver a dejar que me la metieran, hasta que conocí a raúl, que fue realmente el primer hombre con quien estuve, no me rompio el himen, pero conocí el placer con él, como he dicho me quedé embarazada y nos casamos muy jóvenes, él me desvirgó el culo y la boca y conocí el verdadero placer, descubrí que me encantaba el sexo, me encantaba chuparle la polla, sentir aquel palo caliente palpitando entre mis labios, no le costó mucho abrirme el culo y me encantaba que me lo hiciera por ahí, y luego follando una maravilla y para colmo encima le amaba, bueno le amo.

como también contó mi marido nos casamos muy jóvenes, al principio, estuvimos viviendo en casa de mis padres hasta que mis suegros nos compraron un piso, él no dijo, me refiero a mi marido donde nos lo compro a mi no me importa decirlo fue en getafe, la verdad aunque teníamos el piso allí y completamente amueblado, continuábamos viviendo donde mis padres, mi marido trabajaba en una fabrica cerca de legazpi y a mi me ofrecieron trabajo en un buen restaurante de una zona residencial del norte de madrid, así que solo íbamos a nuestra casa cuando yo libraba que era entre semana, junto conmigo entro también a trabajar una vecina y amiga, así que salíamos juntas al trabajo, una vez en legazpi se nos juntaba antonio, que era uno de los cocineros y ya desde allí, los tres cogíamos el metro hasta que llegábamos a la plaza castilla, claro a esas horas por la mañana el metro iba hasta arriba, y yo notaba que antonio se arrimaba mucho a mi, a veces se colocaba detrás de mi y notaba su enorme polla rozándome el culo y el caso es que me gustaba, en poco tiempo mi amiga se lio con el metre, el cual tenia un apartamento en una torre junto al restaurante, la muy cabrona no paraba de ponerme los dientes largos, con la polla que tenia su amante, ella decía que tenia la polla como la trompa de un elefante, me contaba que cuando se la metía por el culo se tiraba una semana espatarrada y sin poder sentarse, nunca le vi la polla aquel hombre en vivo solo una vez que estaba yo ya liada con antonio, en que estábamos los cuatro en el apartamento del metre, ellos se metían en la habitación y nosotros nos quedábamos en el salón, salió en calzoncillos y si pude comprobar que lo que llevaba en si interior debía de ser algo descomunal, pero bueno volvamos al principio, como he dicho todo comenzó en el metro, llevaríamos mes y medio trabajando allí y en uno de esos viajes en los que antonio me pegaba su polla al culo, me giré y me coloque enfrente de él pegando mis tetas a su pecho, él me tomó por la cintura y arrimó sus caderas a las mías, estábamos muy juntos, eso a nadie le llamó la atención ya que el vagón estaba lleno de gente, solo mi amiga se dio cuenta de lo que estaba pasando en aquel momento, antonio bajo sus manos de mis caderas hasta mis glúteos y comenzó a sobarme el culo, yo empecé a acariciarle el pene por encima del pantalón y así estuvimos hasta que llegamos a nuestra parada, salimos ya abrazados del interior del metro, cuando llegamos al trabajo todo iba normal como todos los días, yo no lo sabía pero la cabrona de mi amiga le dijo a su amante que nos dejara el apartamento y él le dio la llave a antonio, ya después de las comidas, antonio me dijo que me cambiara que tenia una sorpresa para mi, me resulto raro ya que después de las comidas, teníamos que recoger todo y dejar todo preparado para luego las cenas, lo que yo no sabía que los otros habían quedado en hacer eso para que antonio y yo tuviéramos todo ese tiempo libre hasta la hora que debíamos de salir. yo le hice caso me cambie y le seguí sin decir nada, ni cuando entramos en el edificio, ni cuando llegamos al apartamento, estaba como alucinada y la verdad es que no sabía que decir, ya una vez dentro, él me tomó y por la cintura y comenzó a besarme con pasión yo me de hacer, lentamente comenzó a desnudarme mientras me besaba, sus manos no paraban de acariciar cada rincón de mi cuerpo que iba quedando al descubierto, no tardó mucho en dejarme solamente con las bragas, me llevó a la habitación y me tumbo en la cama, continuo besándome y fue bajando, primero se entretuvo en chuparme, acariciarme y besarme los pechos, luego volvió a continuar bajando y se entretuvo en besarme y pasarme la lengua por todo el vientre, jugando con mi ombligo mientras que con las manos me iba bajando las bragas, levante el culo para facilitar que me las quitara, cuando vio mi coño peludo, hundió sus labios entre mis piernas, las cuales separé comenzó a pasármela por todo el, con sus dedos separo mis labios vaginales y continuo chupando en el interior, la cabeza me daba vueltas, me sentía derramar estaba completamente cachonda y no paraba de gemir con cada lengüetazo, se separo de mi durante un rato en el que comenzó a desvestirse, cuando le vi comencé a ayudarle, se encontraba de pies solo con el calzoncillo me arrodille junto a él y comencé abajárselo, no tardo mucho tiempo en aparecer ante mis ojos su polla, cuando la vi mis ojos se iluminaron tenia una polla bastante mas gorda que la de mi marido, me llamo la atención ver su capullo al aire, gordo y hermoso, la tomé con mi mano y me la acerqué a la boca introduciéndola en su interior, cual no fue mi sorpresa que cuando aún no tenia ni media polla dentro de la boca cuando comencé a sentir como se me llenaba de algo espeso y caliente que no tuve mas remedio que echar fuera para no vomitar, él rápidamente fue al baño y se lavó bien, volvió junto a mi y comenzó otra vez a besarme y acariciarme, busco un preservativo en su cartera, y se lo colocó, entendí que ya había llegado la hora de sentir todo aquel hermoso miembro dentro de mi, así que volví a tumbarme en la cama boca arriba y separé mis piernas para dejar mi coño bien abierto y facilitarle la entrada en mi interior, mientras él se colocaba encima de mi, tenia mi chocho bien húmedo y abierto y no le costo nada encontrar la entrada,la fue hundiendo dentro de mi muy despacio, sentí como aquella gorda polla me rozaba todas las paredes de mi coño, llenándolo por completo, para sentirla bien dentro de mi, coloque mis piernas por encima de sus riñones, mientras el me bombeaba sin parar, perdí la noción del tiempo, solo sabía gemir y chillar de placer, con mi marido sentía placer, gusto me corría como una guarra pero aquello era diferente, el placer me inundaba como nunca había sentido, sentía como mi coño no paraba de soltar flujo, pegué mis labios a los de él con fuerza, cuando terminó y me fui a levantar casi me caigo, mis piernas no me sostenían, antonio me sujeto y juntos nos fuimos a la ducha y aún tuvimos tiempo de echar otro soberbio polvo.

esa fue la primera vez de muchas que le puse los cuernos a mi marido, y como mi marido libraba los fines de semana y yo entre semana, ese día era cuando venia antonio a mi casa y dejábamos correr nuestra imaginación en la cama, una de esas veces debe de ser cuando raúl nos vio y si ese día cuando venia me dejaba los agujeros bien abiertos, como el cabrón dice que se encontró mi culo, ya os contaré la primera vez que antonio me folló el culo..

🙂 Baguira1955

Compartir en tu redes !!
AlfredoTT
AlfredoTT
Relatos: 4237