Confesión 1: nos cacharon sexeando

Era viernes, y como cada viernes la mayoría de nosotras salía del instituto para con nuestras familias por el fin de semana para regresar el domingo por la tarde nuevamente para otra semana de friega.

Como era costumbre en ese entonces a Kati le tocaba su sesión de sexo con un chico que la atendía en ese entonces y obviamente era yo quien la cubría para con su mamá diciendo que iríamos al cine o alguna otra pavada que se nos ocurriera. 💕💕

Richi era el galán de entonces (años después él se convertiría en mi novio y posteriormente en mi follador de cabecera, pero esa es otra historia) y acudimos a su departamento donde vivía con su madre y hermana que nunca estaban. Como yo no tenía otra cosa que hacer más que cubrirla a ella pues la rutina era que ellos se metían a follar a la habitación de Richi mientras yo me quedaba en el cuarto de la hermana masturbándome mientras los oía follar.

La verdad es que era muy excitante escucharlos fornicar ya que aunque para ese entonces yo todavía era virgen la verdad es que era una fanática de la paja y de las chicas. En ese entonces en el instituto pasaba por lesbiana y a eso me dedicaba a escondidas de Kati (mi mejor amiga) quien fingía demencia por no romper nuestra querida amistad.

Como decía, en aquel entonces ellos se disponían a follar y yo normalmente me entretenía rascándome el coño como maniática.

En esa ocasión llevaba un jean con raspaduras y una panti negra que para ese momento tenía bajados hasta los tobillos mientras jugaba con mi cuerpo a darme placer mientras escuchaba a Kati y Richi apareándose como gatos en celo.

Como nunca había nadie en ese hogar yo normalmente hacía lo que me placía en el cuarto de la hermana mientras los dos tórtolos se bañaban en placer.

Esa tarde la sesión estaba siendo especialmente fogosa y a mi no me quedó más que bajarme el jeans y las pantis hasta los tobillos y en eso andaba entusiasta cuando de la nada se me aparece la figura de Amanda (la hermana ?) Con cara de wtf y me grita qué pedo, y enseguida corre al cuarto de su hermano a exigir explicaciones y se encuentra a Kati dándose de sentones alegremente sobre la verga de su hermano ??.

Qué chingaos está pasando en esta casa gritaba como desaforada mientras los tórtolos en su habitación y yo en la de ella nos acomodábamos las ropas para salir huyendo de allí cuánto antes.

En menos de un minuto Kati y yo salíamos de ese apartamento mientras la hermana histérica hablaba por el móvil con su mamá diciendo que su dulce hogar estaba siendo usado como burdel por su hijito consentido.

Kati y yo salimos de allí prácticamente corriendo y muy asustadas hacia nuestros hogares.

La consecuencia de ello fue que al siguiente viernes la mamá de Kati nos dijo que pasaría por nosotras al instituto para hablar con nosotras.

Las dos estábamos asustadísimas pues a mi me aterrorizaba que la mamá de Kati se hubiera enterado de la forma tan pecaminosa en que me encontraron en casa de richi. Pasó a recogernos y allí, dentro del coche y sin ninguna escapatoria, nos interrogó a ambas diciendo que sabía lo que había pasado.

Kati tuvo que confesar que ya no era virgen desde hacía un año y que ya había tenido experiencias con 3 o 4 chicos (mintió, eran 6 ?). Yo no tenía nada que confesar pues era virgen y por suerte no me interrogó por asuntos lésbicos que eran más lo mío.

De allí nos condujo a un consultorio donde a Kati le pusieron el implante del brazo y a mi me hizo prometerle que le dijera cuando empezara a tener relaciones para que me pusiera el implante y que ella pagaría sin que se enterase mi mamá (que era la mejor amiga de mi mamá). Descansada al oír eso se lo prometí.

Cuando Kati salió del consultorio su mamá volteó a verla y sólo dijo de manera simpática: pues aquí viene la putita de mi hija, vámonos.

Sobra decir que a casa de Richi nunca regresamos por obvias razones y que cada que veíamos a su hermana en una fiesta o reunión de familias, era un martirio verla sin que a Kati y a mi se nos ruborizaran las mejillas.

Tres meses después, en la fiesta de graduación de año 9, Richi me hizo suya enfrente de Kati y yo me quedé pensando en por qué había esperado tanto para como decía Kati entregarme al vicio. Se lo tuve que decir a mi tía (así le digo a la mamá de Kati) y ella me llevó a que me pusieran el injerto.

De allí en adelante las dos nos comportábamos como leones en celo buscando predadores. Pero esas serán otras historias que después pienso contar.

By: Asesora del amor 🙌❤️

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AlfredoTT
AlfredoTT
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