La violación de María

Autor: cansaode | 20-Feb

Confesiones
Una tarde charlando con Carmen, después de haber tenido un pequeño encuentro en el último rellano de la escalera, me preguntó si alguna vez había tenido alguna fantasía que no había podido cumplir, y lo primero que se me vino a la cabeza fue, follarme a María una de sus amigas. María era de las típicas mujeres, casada, abuela, y que todavía iba a misa todos los domingos, que seguro no follaba con su marido desde hacía años, y que seguro que este no la había visto empelotas ni la noche de bodas. Yo le echaba más de 55 años, rubia de bote, de 1.65 mas o menos y si Carmen tenía las tetas grandes, María no le quedaba atrás, Carmen gastaba una talla 120, y estaba seguro que las de María eran incluso más grandes, siempre la había visto bien vestida, y cuando nos cruzábamos por las escaleras y me quedaba mirándola, se acomodaba la ropa para taparse como si estuviera enseñando y no quisiera hacerlo. Mujer de las que usan corsé y faja, no llegaba a estar gorda, pero por como podía apreciar la carne de sus brazos, que era lo único que esta mujer enseñaba, le colgaba un poco y una cosa que la delataba cada vez que entraba por el pasillo, era el agradable perfume que siempre dejaba por donde pasaba. Carmen me dijo que me olvidara de ella, que me conformara con poder follarme a todas las demás amigas de ella, y no eran pocas. Un día llegué a follar con 4 de ellas en el mismo día, y más de una vez con 3 de ellas a la vez. Carmen, Teresa y Juana eran 3 autenticas ninfómanas, nunca estaban satisfechas, había días que me dejaban con el pito bien dolorido.

Pero mi obsesión era María, así que le pedí a Carmen que la fuera preparando, y que me fuera informando de sus gustos, pero por mucho que le preguntaba, siempre me decía que no había nada que hacer, y que tuviera cuidado con ella, que era capaz de meternos a todos en un buen lío. Lo único que me dijo es que cuando se tomaba una copa se mareaba y con más de una se dormía al cabo de un rato. Le dije que una tarde que la tuviera con más de una copa me diera un timbre y yo bajaría. Sabía que a Carmen todo esto también la ponía como una moto, y esa tarde no tardó en llegar.

Un timbre y bajé corriendo, tuve que esperar a que Carmen me abriera la puerta, me dijo que la tenía en el sofá del comedor, cuando llegué hasta ella, estaba sentada casi al filo del sofá con la barbilla en el pecho, las piernas estiradas y los brazos descansando en los brazos del sofá, una falda gris más bien estrecha, medias, una blusa clarita, que dejaba ver debajo una especie de body de color crema con encajes y debajo el sujetador, creo que al verla la erección que traía se me bajo por completo de solo pensar que no conseguiría sacarle la ropa, pero había que intentarlo.

Le levanté la cara, María resopló, abrió un poco los ojos, pero ni atinó a decir, ni mover un solo brazo, yo no estaba dispuesto a muchos preámbulos, así que sin espera, metí mi mano por la parte de arriba de la blusa y busqué sus tetas por debajo de toda su ropa, estaban tan blanditas como cabía esperar, y en cuanto alcance su pezón y apreté mi mano, resopló e intentó sacar mi mano, pero estaba tan borracha que no tenía fuerzas. Carmen insistió en que la dejara, que me costaría mucho trabajo sacarle la ropa, pero yo no me iba a dar por vencido tan pronto, me coloqué entre sus piernas e intenté subir su falda hacía arriba, me costó trabajo, pero poco a poco conseguí dejar su falda enrollada a su cintura, tiré de la blusa y de toda su ropa hacía arriba y conseguí también sacárselas de dentro de la falda, desabroché todos los botones de la blusa y subí el body hasta dejárselo por encima de sus inmensas tetas.

María resoplaba y con sus manos intentaba quitar las mías, un sujetador blanco quedó a mi vista, un sujetador de encaje y casi transparente, dibujaban sus aureolas sonrosadas y sus pezones aplastados y para mi sorpresa, estaban más arriba de lo que estaba acostumbrado a ver en las demás, ella seguía protestando e intentaba bajarse la ropa con las manos, balbuceaba palabras que no se llegaban a comprender, metí mis manos por la parte de abajo del sujetador y le saqué las tetas dejando el sujetador mas arriba. Sus tetas cayeron por el peso de la gravedad, blancas y con algunas pecas, eran inmensas, por su posición en el sofá caían a cada lado de su cuerpo, sus aureolas eran tan rosadas que se perdían en medio de las tetas, y sus pezones rajados, estaban aplastados, me lance a por ellas, las apreté con las manos y empecé a chupar y morder cada milímetro de ellas, al cabo de un momento como era de esperar sus pezones se pusieron duros como la piedra, los chupaba con deleite, mordía y solo conseguía que María resoplara y moviera la cabeza de un lado a otro, mientras, Carmen se había desabrochado la blusa y andaba jugando manoseando sus tetas y chupándose los pezones ella misma, yo hubiera seguido mamando esas tetas toda la tarde, pero sabía que no tenía mucho tiempo, la faja que llevaba era bastante elástica por lo que me costó menos trabajo bajársela de lo que yo esperaba, la braga era conjunto con el sujetador, lleno de encaje, y todo transparente dejaba a la vista una mata de vellos medio rizados pero no muy abundantes, con todo lo cuidadosa que se veía para la ropa, me sorprendió ver un pubis tan poco cuidado, sus vellos asomaban por todos los sitios, por encima de la braga y sobre todo por los bordes, pero eso me excitaba.

Ella resoplaba, pero ya no hacía intento de apartar mis manos, su barriguita y el comienzo de sus muslos estaban flácidos y bastante blancos, le bajé como pude la braga y se la saqué de unas de las piernas, mientras Carmen que ya sabía que tal como estaba me costaría follármela, me dio los cojines oportunos para mis rodillas y los dos banquitos para colocar los pies de María y que sus piernas quedaran algo más altas y bien abiertas, ahora tenía ante mi toda la visión de su coño y de su culo, unos labios oscuros y grandes rodeados de vellos y su ano tan oscuro como sus labios, pero apretados por la posición de sus nalgas, yo estaba tan excitado que no esperé, abrí sus labios con mi polla y la ayuda de mi mano e intenté meterla, un poco seco que tuve que jugar con mi capullo pasándosela por los labios y jugando con su clítoris, hasta conseguir que María volviera a resoplar y en menos de un minuto mi polla pudo entrar en su coño hasta los huevos, abrió la boca con cara de sorpresa, pero antes de que fuera capaz de decir o hacer nada volví a lanzarme a por sus tetas y empecé a moverme dentro de ella. Mi peso le impedía quitarse, sus manos en mi cabeza, solo atinaba a decir... Carmen... Carmen... y entre Carmen y Carmen resoplaba y gemía, separé mi cara de sus tetas sin soltárselas, para poder darle con más fuerza, mis huevos chocaban con su culo y sonaban.

Carmen estaba a nuestro lado de pie, con la falda subida, la braga echada hacía un lado y metiéndose los dedos todo lo que podía. Lo bueno de follar con mujeres de estas edades es que no hay posibilidad de que se queden preñadas, así que sin soltarle las tetas, y acompasado con un pequeño movimiento que ella empezaba a hacer con su cadera solté toda mi leche dentro, hasta que no me vacié por completo no dejé de moverme y hasta que no soltó mis manos que apretaba con fuerza, dando la impresión que también se había corrido, me aparté un poco de ella, pero yo quería más, así que me agaché para chupar ese coñito que había quedado con los labios abiertos y pringoso y ese clítoris brillante, en cuanto pasé mi lengua por su clítoris si que escuché los primeros gemidos de María, a mi me gustaba saborear mi leche mezclada con su flujo cuando iba saliendo, eso me excitaba, la muy zorra empezó a gemir más fuerte cuando metí mi lengua dentro de su cueva y de pronto empezó a mearse en mi boca, eso me excitó de nuevo, intenté beberme toda la cantidad que pude y cuando terminó, mi polla estaba de nuevo completamente dura, coloqué mis manos al final de sus muslos detrás de sus rodillas y le levanté las piernas todo lo que pude.

Ella ya estaba más despierta, pero no hacía intento de apartarse, de esta manera su coño y su culo, subieron y quedaron bien expuesto, volví a meter mi polla en su coño, ella protestó se la saqué, coloqué sus piernas apoyadas en mis hombros, ella estaba un poco incomoda, con mi mano busqué la entrada de su culo, y sin miramientos empujé con fuerza, ella soltó un grito, pero tal como estaba no podía moverse, saqué y metí rápidamente, hasta conseguir tenerla toda dentro su culo, entonces bajé las piernas de mis hombros, ella me cogió la cabeza y tiró hasta conseguir volver a apretarla contra sus tetas, con su cuerpo empujó de tal manera hacía abajo que tuve que sacársela para poder sentarme en el suelo, y para mi sorpresa, ella se dejó caer hacía abajo, hasta volverse a meter mi polla en el culo, estaba sentada sobre mi, sollozaba, pero tenía mi polla completamente dura dentro de su culo, apoyo las rodillas en el suelo, se dejo caer hasta colocar los brazos estirados en el suelo a cada lado de mi cara y empezó ella misma a subir y bajar sobre mi polla, cada vez más fuerte y más rápido, yo apretaba sus tetas con fuerza y sentía como sus nalgas se apretaban contra mi cuando se dejaba caer, en esos momentos Carmen se colocó de rodillas mirando a María se levantó la falda se apartó la braga con la mano y me dejó enterrado entre sus piernas, tuve que soltar las tetas de María y coger con fuerza las nalgas de Carmen para que no me ahogara con la cantidad de flujo que salía de su coño y con su peso, María resoplo y se dejó caer por completo sobre mi polla, gemía a la vez que sentía su esfínter apretar la base de mi polla, en ese momento me empecé a correr al igual que Carmen que a la vez que se corría me meaba toda la cara.

María tardó un poco en sacarse mi polla de su culo, su esfínter apretándomela impedía que se bajara mi erección y Carmen no hizo ni el intento de levantarse de mi cara, al momento sentí como María se vestía apresuradamente y salía dando un portazo. Cuando Carmen se quito me dijo que no me preocupara, que le había gustado y volvería a por más. Y así fue...

Relatos eróticos relacionados

[Lesbico] La historia que os cuento sucedió hace tan solo una semana, una semana que he pasado ansiosa por que llegase la hora del trabajo, tan solo por verla a ella, a mi jefa. Soy una chica de 19 años que buscaba trabajo desesperadamente, soy una chica morena de ojos marrones, 1,68 de altura, pelo largo y lacio, delgadita y con un cuerpo atlético puesto que me gusta mantenerme en forma y voy mucho al gimnasio para estar a gusto con mi cuerpo.
24-Jul
35132
Mi esposa ana y yo queremos darles las gracias a todas aquellas personas que siguen nuestras aventuras esperando siempre contarles todo con lujo de detalles esta vez les contemos de unas fotos que encontramos de cuando fuimos un dia a unas albercas y conocimos a juan carlos un hombre mas mayor que yo y mi esposa pero de un buen ver aun, en esta ocacion nos paso hace años atras cuando apeas teniamos casi 6 o 7 meses que nos casamos. ese dia llegamos alas albercas y estaba un poco solo...
13-Apr
82746
    Es algo que nadie debe saber,pero a la vez quisiera que todo mundo se enterara como soy en realidad....      Soy una señora viuda de 65 años,honorable,seria,decente...una ama de casa,toda mi vida actúe de modo intachable...hasta hace poco,fue culpa de mi yerno;no mía se los aseguro,el tiene 30 años y siempre ha vivido en mi casa,es muy buen muchachito y no tengo queja de el,por lo que siempre me mostré muy amable y lo trate bien,por su trabajo mi hija sale muchos fines de semana así que casi siempre estamos...
05-Nov
229265
Los fines de semana vendo almejas a los turistas en la playa, soy un chico emprendedor y vendedor, y así me gane dinero para la casa. Un sábado temprano iba vendiendo las almejas con jugo de limón cuando un par de chicos musculosos y simpáticos me preguntaron si quería modelarles unos trajes de baño, les pregunté cuanto me darían y me dijeron 100 la hora. Acepté y como había vendido todas mis almejas tenia el tiempo libre. Me fui con ellos a una rocas apartadas donde nadie iba a vernos...
23-Dec
37750
  Hola soy un chico de 24 años y esto que les voy a contar es una experiencia que jamás imagine tener. Una mañana salí a trabajar, como en la estación del metro que me subo siempre viene muy llena, decidí salir más temprano que de costumbre, para irme unas estaciones atrás y poder ir sentado sin la molestia de ir apretado. Llegando a la estación del metro donde habitualmente subo, entro la gente y sonó la alarma del metro para cerrar las puertas. En eso entraron dos muchachos corriendo, eso hizo...
26-Apr
95056
Buenas a todos/as, ya se que han subido muchos relatos con este título, pero mi primera vez fue un poco... llamemosla, ...extraña.
Bueno, esto sucedió hará como unos 5 años. Yo, en estos momentos, cuento con 24 (en poco más de un mes cumpliré 25) y mi pareja es dos años mayor que yo.
Lo cierto es que tardamos casi dos años como pareja para mantener nuestra primera relación sexual (también era la primera vez para ambos, ya que éramos vírgenes los dos) y, como ya he contado antes, fue algo extraña,...
28-Jul
56680
Sabado por la mañana, despierto emocionada porque este fin de semana me reunire con mis amigas y tendremos fiesta con los chicos. Es decir, el fin de semana seré mujer. Me di una depilada en las piernas y me rasuré las axilas. Normalmente estoy depilada pero necesitaba un retoque. Me bañé muy bien y me puse en todo el cuerpo crema para suavisar la piel. Me pinte las uñas de los pies de color rojo. De mi cajón secreto, saque mi ropa interior de mujer: panti y brasier color azul...
30-Jul
69529
Después de tremenda seccion de sexo entre mi mamá mercedes y yo ,se levanto y se fue al baño y se lavo bien su panocha y regreso asu cuarto y se puso su vestido y se abrocho los botones y se amarro su pelo y se puso su mandil como toda una señora decente ,ama de casa. alos 20 minutos llego mi tia y me saludo y charlamos un rato y se fueron con mi mamá y yo me puse a hacer unas tareas de la...
25-Oct
36979
Esme tenía el primer fin de semana libre en mucho tiempo. Enseguida se lanzó a Internet para buscar un chollo e irse un par de días a la playa. Lo más barato que encontró fue un hostel bien ubicado con baño compartido. Por supuesto, no era ningún lujo, pero al menos conocería a gente. Llegó acaloradísima con el sol de mediodía y le recibió un señor muy amable y algo mayor. Le mostró su habitación, la cocina y el resto de estancias. El hostel era pequeñito y sólo contaba con dos...
01-Sep
28988