Mi primita y sus 18 añitos relatos pornograficos

Me llamo Jorge, y estoy próximo a llegar a los 30 años. Pero esta experiencia la he pasado hace menos de una semana con una primita mía, que está muy buena.

Mi prima, se llama Daniela, tiene cumplidos 18 años, 1.65m, cabello castaño claro, ojos pardos muy claros y preciosos, y un cuerpo espectacular. Afortunadamente en mi familia hay más de una chica que tiene el cuerpo tan lindo como el de ella.

Bueno, esto sucedió en el transcurso de esta semana, mi prima llegó después de bastante tiempo de viaje, porque ella no vive en mi ciudad, y se quedó en mi casa a pasar unos días por aquí, porque estaba un poco depre por haber terminado con su novio.

Yo vivo normalmente solo y eventualmente me quedo con algunas chicas por unos días en mi casa. Pero bajo las circunstancias, no podía llevar a nadie. El día que ocurrió todo, regresé yo del trabajo y la encontré a mi prima que estaba bastante triste, llorando y viendo unas fotos en la sala de mi casa, me senté a su lado y comenzamos a conversar acerca de lo que le había pasado. Y ella me dijo que ella lo quería mucho a su novio, pero el problema había sido que después de tanto tiempo con él, su novio le había pedido hacer el amor, pero que ella le ponía como pretexto que era conservadora, y simplemente no quería hacerlo porque ella es virgen y tenía un poco de temor. Sin embargo el novio este, la sacaba de su casa y la llevaba a su depa y le mostraba películas porno para calentar a mi prima, y un día lo consiguió, le puso una porno en la que había una parejita haciendo el amor por todas las habitaciones de la casa y por todos los agujeros que tenía ella. Entonces mi prima ya bastante caliente se dejó llevar para hacer el amor con él. Al desvestirse él, le mostró su miembro el cual (después de compararlo imaginariamente con el de la película) resultó ser bastante pequeño y mi prima no pudo disimular su sorpresa al ver tan pequeño miembro. Motivo por el cual él se molestó y después de una gran pelea, arreglaron las cosas y cuando nuevamente él quiso intentar algo con ella, ella le dijo que además era menor de edad y que mejor esperaran hasta que cumpliera sus 18 para sentir menos remordimientos (con sus prejuicios de conservadora que tenía).

Finalmente ellos terminaron y ella vino a visitarme y a pasar unos días despejando su mente de tan penoso incidente. Bien, este día, en el que la encontré llorando, con las fotos y hablamos de todo lo anterior, era el día en que ella cumplía sus 18 años. Así que comencé con bromearle que ya tenía 18 y que tenía que recibir su regalo de todas formas y cosas como esa, y Daniela respondía con una sonrisa cómplice y con sus ojos todavía tristes. Así que saqué un vino para celebrar su cumple y para calentarla un poco. Ella accedió a tomar el vino conmigo y poco a poco fue animándose y olvidándose del novio. Ya al promediar las 8 de la noche, ella estaba bastante alegre, y estabamos bailando en la sala de mi casa, los dos solos y todo tipo de música, pero lo bailavamos todo muy pegados y como si fuera música romántica.

Luego me animé y la besé y ella respondió a mi beso con algunas caricias sobre mi pecho, sus labios junto a los míos y su lengua dentro de mi boca. Esto me excitó más aún, así que comencé a tocarle las caderas con una mano y el pecho con la otra y ella se dejó llevar. La llevé abrazada a mi dormitorio, y le fui quitando la ropa, ella estaba muy caliente y se separó de mí y se quitó la ropa ella sola de forma muy rápida, y me pidió a mi que hiciera lo mismo. Luego me miró (cuando estaba ya desnudo) y me dijo que también yo la había sorprendido con mi miembro, pero no como su novio, sino favorablemente, porque tengo un miembro que si bien no es muy largo (16cm), es si muy grueso. Se recostó en la cama y me dijo que hiciera todo lo que quisiera con ella, que ella estaba dispuesta a todo, para celebrar sus 18, y para olvidar al infradotado de su ex. Así que aproveché para besarla, recorrer su cuerpo entero con mis labios, y mis manos, luego hicimos un 69 y ella me dió una muy buena mamada (según dice, lo aprendió viendo los videos que le mostraba el ex). Y finalmente la acomodé para penetrarla, ella no gritó, le rompí el himen y ella simplemente mordió la sábana, me miró y vi algunas lágrimas salir de sus ojos, pero ella no me dijo nada, luego de eso, comenzamos con el mete y saca y ella poco a poco fue comenzando a disfrutarlo más y más, reía y se movía como una loca, me dijo que nunca había disfrutado tanto en su vida. Luego de dos orgasmos de ella y uno mío, nos quedamos recostados uno al lado del otro, acariciándonos y besándonos. Pero ella se quedó con muchas ganas, por lo que comenzó a chupármelo nuevamente para que comenzara de nuevo. Pero le dije que como ella me había dicho que podía hacer lo que quisiese con ella, ahora quería hacerselo por el culo. Pues es bastante atractivo, blanquito, redondo, durito y suave al tacto. Ella accedió, y se pudo dócilmente al revés, separó las piernas y me dijo sensualmente "sírvete", saqué algo de vaselina que tengo junto a mi cama (para las frecuentes ocasiones en las que la necesito), y comencé a untársela en el culo, ella se movía y se metía dos dedos en la vagina mientras yo hacía esto, luego comencé a metérselo y por allí si que tuvimos problemas, porque como dije antes, mi pene es grueso y es dificil iniciar a una mujer (tanto por delante y peor aún por detras). Así que fue poco a poco, acariciándola y tuve que traerle más vino para que afloje más su cuerpo, después de 20 o 25 minutos de caricias, dos vasos de vino más y mucha vaselina, comencé a introducírselo poco a poco, hasta que ella nuevamente se quedó callada, volvió a lagrimear, pero siempre con una gran sonrisa y finalmente le di un fuerte empujon que se lo terminé de meter. Fue una excelente experiencia, tanto para mi como para ella.

Ahora, han pasado tres días, y los tres días hemos hecho el amor en todas las habitaciones de mi casa, y todos los días ella despierta a mi lado pidiéndome sexo.

Estoy feliz, y ella también lo está, hoy estoy más feliz porque ha llamado a sus padres y les ha dicho que se siente muy mal y que quiere quedarse aquí unos meses, y que va a ver algún trabajo por aquí para quedarse más tiempo hasta que se le pase su depresión. Pero ambos sabemos que no está deprimida y que ya ni recuerda al ex. Lo cierto es que se me vienen unos meses muy excitantes y cansados.

Ya les contaré poco a poco otros encuentros.