Ducha fría? Noooo! Mejor calentita xxx historias

Autor: Carmelo | 24-May

Amor Filial

Esta historia me ocurrió hace ya algunos años; cuando tenía 14 y ni siquiera imaginaba que llegaría a ser gay. Ahora tengo 28 y me he animado a contarlo, pues encuentro esta página muy seria. Comienzo: Mi padre siempre ha sido un hombre muy atlético, con un cuerpo espectacular, gracias a los deportes que ha practicado. Era mi ídolo, y no solamente porque todos los padres son admirados por sus hijos. Un día en el gimnasio se lastimó un codo y, aunque ni siquiera le vendaron, su movilidad se vio afectada bastante hasta verse curado. Al día siguiente de la lesión, recibió un masaje de cuerpo entero. Llegó a casa, entró a ducharse y, más o menos, se las arreglaba solo. Pero a la hora de enjabonarse la espalda, pringada de aceite del masaje, la zona que debía frotar su brazo herido no era alcanzada, por lo que me pidió ayuda. Yo estaba harto de verle desnudo, eso es cierto; pero aquel día lo vi de otra forma, añadiendo mi reciente entrada al mundo del sexo, mediante numerosas masturbaciones. Que iba caliente, vamos! Pues acudí a la llamada de papá, me pidió que le enjabonara con la esponja y yo obedecí. Empecé por la zona indicada por él mismo, siguiendo por los hombros. Ya que estoy... -le dije. Y él aceptó, dándome las gracias sin girarse. De los hombros bajé al centro de la espalda, frotando con suavidad. Mientras hacía esto, le miraba el culo con cierto interés, notándome algo excitado. Hasta me di cuenta que en un momento dado me relamía. Bajé la esponja y froté sus nalgas, duras y redondas; perfectas. Hizo un pequeño gesto, como si quisiera girarse para decirme que no. Pero, muy al contrario, sonrió de forma que le pude oir. Metí la esponja por debajo de la entrepierna y pude tocar con mi pulgar sus huevos. Tampoco se quejó por la imprudencia. Subí la mano, frotando con la espoja a lo largo de toda su raja del culo. Apretó gimiendo ligeramente. Ahí es donde me di cuenta de que aquello le estaba gustando. Fue entonces cuando pasé ambas manos por delante de su pelvis y ¡ahí va, se me cayó la esponja! Mas no la recogí; sino que me impregné las manos con espuma de su espalda (el grifo estaba cerrado, por lo que todo el jabón permanecía en su cuerpo) y con las mismas le enjaboné el vello púbico con mucho cuidado. Le pedí que se girara y lo hizo. Pero se puso muy serio y me riñó... porque me había empapado la camiseta; sobre todo las mangas, que eran largas. Me asustó, pero comprendí que lo que quería era que me la quitara, para que no me resfriara más tarde. Así lo hice. Él miraba mi pechito de adolescente y sonreía sin maldad; eso lo sé. Continué con la faena y me dijo que por delante ya se había enjabonado y aclarado él solo. Alegué que los favores se hacen completos. Entonces su sonrisa cambió, al tiempo que su verga se agrandaba, pues yo estaba haciendo mi labor muy a conciencia y mi forma de enjabonarle era la de una de mis pajas. Sonreía y me decía: Pues si las cosas se hacen al completo, quítate la ropa que te queda y entra aquí conmigo, que yo te lavaré a ti, como tantas veces he hecho cuando eras pequeñito. El morbo de la situación y mis ganas de ducharme, viendo tanto jabón, hicieron que no tardara dos segundos en desnudarme. Entré junto a mi papá y seguí enjabonando aquel cuerpazo sin un solo vello, como el mío. De hecho, hizo alusión al tema: Qué cuerpecito tan bonito, suave y tierno. Sin vello que depilar aún. Cuando estuvo totalmente cubierto por la espuma, abrí el grifo y lo aclaré. Ahora te toca a ti, me dijo. Su polla seguía casi tiesa. Se puso gel en las manos y empezó a frotarme con mucho cuidado. Ya con el primer contacto, noté mi corazón acelerarse y mi cosita palpitar. Cuando llegó a los muslos aquello ya se descontroló y me puse a cien. Sonrió y no dijo nada. Sólo detuvo el enjabonado y me aclaró rápidamente, para poder atacar a gusto. Se agachó y, con la mano útil, empezó a pajearme. Pero lo hizo durante pocos minutos, pues se puso en pie y, sin dejar de sobar mi rabito, me comió la oreja y mordió mi cuello de una forma que me estaba muriendo de placer. Yo me tiré a su boca, morreando con él largo rato. Después me apartó un poco y, con un pequeño empujón a mi cabeza, me agachó, quedando con mi cara frente a su hermosa polla. Yo no sabía lo que hacer, por lo que decidió enseñarme con un ejemplo. Me tiró en la bañera, se sentó sobre mis piernas, tratando de no pesarme mucho, y comenzó a comerme la polla como si quisiera tragarla entera. Chupaba a diferentes velocidades y yo me moría de gusto. ¡Ni la mejor de mis pajas se asemejaba a eso! Notó que me iba a correr y paró, abriendo el agua fría rápidamente, para mojarme la polla, que perdió su dureza al momento. ¡Qué putada! -Pensé yo. Pero no. LO que pretendía era que no acabara antes de tiempo, naturalmente. Me elevó un poco, se tumbó él y me puso encima suyo, para que yo le comiera a él igual. Así lo hice, pues me fijé bien en cómo me lo hizo. Comí y comí, lamiendo sus huevos y mordisqueando sus ingles. La punta de su verga me dio varias veces en la campanilla y casi me dan arcadas, pero él la retiraba rápidamente y luego me sujetaba la cabeza para acompasar mis movimientos. Cuando le bastó aquello, me retiró de ahí, nos pusimos en pie y me sobó de nuevo la polla con las manos enjabonadas. Luego pasó a mi rajita y después a mi agujerito, donde introdujo un dedo. Yo estaba muy excitado y mi polla se puso como la madera de dura. Metió un dedo más. Otro. Y no hubo un cuarto dedo, no. Lo que siguió fue su polla de acero. Me ensartó vivo y yo lancé un pequeño gemido de dolor, que en segundos fue de placer. ¡Eso era increíble!! Embistió con energía, cesando en la velocidad de vez en cuando. No dejaba de menear mi rabo con su mano. Yo notaba que me iba a correr. Cada vez respiraba con más fuerza y mi corazón se salía del sitio. Él lo notó y reaccionó muy rápido de nuevo, sacando su polla de mi interior. Quería gozar de mi corrida, me dijo. Se metió mi cosita en la boca y chupó de forma lasciva y enérgica, al tiempo que tres de sus dedos follaban mi culo. Con uno de ellos, tocó mi próstata apretando y ya no pude aguantar más: me corrí en su boca. Siguió chupando para exprimir bien mis jugos, sin dejar de mover sus dedos en mi coñito recién desvirgado. Cuando no me quedaba más leche, ni nada, se sacó mi pequeño pene flácido de la boca, se relamió y se puso en pie, indicándome que me agachara yo. Y eso hice, metiéndome su polla en la boca y chupando, tratando de imitarle. Pero quise imitarle en todo, por lo que puse gel en una mano y le froté el culo, metiendo un dedo, dos, tres. Miré alrededor y vi uno de los tubos de crema de mi madre, cuya forma era casi la de un vibrador. Con eso me follé a mi padre, mientras le comía la polla. Él abría las piernas para sentir mejor aquella improvisada polla dentro. Le asestaba golpes en el interior del ano, que hacían se estremeciera como un poseso. En un momento dado, no pudo más; sujetó fuertemente mi mano, empujó con fuerza y en cuatro o cinco embites salvajes se folló a conciencia, de forma que su leche brotó hacia mi garganta a gran velocidad. Me supo rica y tragué casi toda. Pero me apetecía compartirla con mi padre, puesto que era suya. De modo que me puse en pie y él ayudó a mi acción bajando un poquito, para besarnos apasionadamente mezclando nuestras lenguas, labios y salivas con el esperma que dejé en mi boca. Luego me agaché de nuevo y acabé de chupar lo que le quedaba en la reserva. Nos duchamos otra vez, nos secamos uno al otro y salimos de la ducha, cada uno a su cuarto, minutos antes quen llegara mi madre. Nunca lo volvimos a hacer, pero yo ese día supe que el sexo con chicos era lo mejor para mí.

Relatos relacionados

Nada se compara con trner relaciones con tu propia madre eso es lo maximo no tiene descripción. después de hacerlo con mi mamá por la tarde se limpio su chocho y se vistio y siguio sus actividades normalmente y no tocamos el tema. por la tarde me fui a bañar al rio y regrese y crnamos temprano alas 7 pm y nos pusimos a ver tele y la sente en mis piernas y alas 10 pm se metio a bañar y cuando salio me sorprendio pues...
26-Oct
37057
Hace unos días tuve que ir a Murcia a hacer unas gestiones. A la ida iba más apurado de tiempo, pero a la vuelta paré en un área de descanso de la autovía. En un principio por curiosidad, porque no tenía ni idea si esa área era zona cruising. Había un turismo aparcado al borde de la cuneta y dos camiones detrás. Aparqué delante del turismo, me bajé de mi coche y fui caminando hacia la parte de atrás de los camiones, donde había visto una mesa con bancos de madera. En...
19-Apr
63346
Como le decíamos entre los amigos. La Mari. Ya que a su muerte teníamos que entregar el departamento antes de tres meses, y bueno como el no tenia a nadie así que la Concha, la Nola y yo estábamos sacando las cosas que dejo nuestra amiga un Puto sin Madre, (expresión que damos para alguien que es un gran ser humano en este medio tan cochino que es la homosexualidad) si un amigo que siempre nos brindo su espacio sin interés ni nada por el estilo, un ser...
31-Dec
41163
Me llamo Suny y esto sucedió cuando tenía 23 años. Mi hermana Rosmery, ella hace poco se caso con Anderson, un chico que está de muy bueno. No es muy alto, debe de andar por el 1?70, pero es guapo, atento, cariñoso y muy simpático. Los dos tienen ya casi 30 años, lo cual les hace ser una pareja ideal. Desde el principio nos cayó estupendamente a todos, incluidos mis padres y por supuesto a mí también. Me encantaba su poder de atracción, con unos preciosos ojos oscuros, capaces de hipnotizar...
11-May
119652
El verano de sus dieciocho años Javier se había convertido en un adolescente muy atractivo, un poco inseguro, tímido, pero con un indudable atractivo para el sexo opuesto. A pesar de su timidez, Javier era un chico muy sexual, se masturbaba frecuentemente, leía a hurtadillas revistas pornográficas que compraba en el kiosko, se excitaba con escenas de cama de las películas que veía en la tele, tanto con los cuerpos masculinos como con los femeninos. Aquel verano de sus dieciocho años, Javier vivía ardiendo en deseos por Ana. Ana era...
29-Jan
31856
Esta es una historia lesbica me paso hace aproximadamente una semana yo tengo 20 años y mi novia 18 ella es una chica algo alta de pechos grandisimos y tiene una vagina super grande y rica es morenita pero bien linda de cabello largo. esa tarde al venir a mi casa me subi ensima de ella no haguantaba la calentura y me movia en su cosita ella solo gemia despacio le levante la camisa y empeze a besar sus pechos a chupar su pezon y ella decia mmmmmm que rico...
15-Jul
25761
Siempre pense que mi vida ya estaba resuelta. Tenía 6 años con mi novio y todo indicaba que me iba a quedar con él. Pero hice un viaje que cambio por completo mi vida y mi modo de ver las cosas. Me llamo Raquel, tengo 26 años y lo que les voy a contar me tomo mucho tiempo meditarlo. Pero creo que escribiéndolo es la única manera de liberar todos estos sentimientos y deseos que tenia dentro. Trabajo de recepcionista en una empresa y mi enamorado de entonces, Coco trabaja...
02-Mar
19361
Yo vivo en Costa Rica,y estaba en el colegio era un chico algo tímido, un domingo de elecciones presidenciales a mis 18 años fui a votar por primera vez y ahí sucedió todo. ya era tarde y estaba en casa de una vecina cuando una señora de 38 años, se acerco y me abrazo yo creo que hace rato me estaba viendo y yo despistado como siempre ,no le tome importancia cuando de pronto me dijo que fuéramos al baño y yo la acompañe, lo que no tenia idea era...
24-Feb
64041
Como era de costumbre, al salir de las clases del Instituto, compraba el pan en una panadería de allí cerca. En ella habían tres personas trabajando: La dueña, su hija y su hijo. La dueña era de unos 45 años, robusta y con buen carácter (algo corriente ya que quería sacar adelante su negocio). El hijo, de unos 26, era más bien descuidado y no estaba muy convencido con el trabajo que desempeñaba. Y la hija, una preciosa muchacha de 18 años, se esforzaba por mantener la clientela que iba...
23-Jan
24535