Mi culo cachondo por dinero o placer?

Me miraba al espejo lentamente, tratando de que cada detalle fuera perfecto. You era una nina bien, con dinero a la que nada le faltaba. Pero estaba muy aburrida en mi vida sexual, asi que habia decidido cumplir una de mis fantasias. Hacer lo que muchas otras hacian por necesidad, yo lo iba a hacer por placer. Mi atuendo tenia que exclamar que era una mas de tantas mujeres de la calle. Mi falda era corta, muy corta y pegada, mostraba muy bien mi enorme y firme trasero al igual que mis largas y torneadas piernas. Arriba, solo un brassiere que cubria una pequena parte de mi grandes senos, digo cubria por que era todo lo que hacia. A mi edad los tenia parados, redondos y firmes, no necesitaban de ayuda especial para llamar la atencion de cualquiera que pasara en frente, hasta algunas mujeres se quedaban mirando al verme caminar y mis senos brincar al ritmo de mis pasos. Encime tenia una mini jacket, abierta para mostrar mis pechos y solo cubria hasta donde terminaban mis pechos y comenzaba mi pequena cintura. Me deje el pelo suelto, era largo y oscuro, muy oscuro, hacia que mi piel morena se mirara mas clara. Estaba muy nerviosa mientras caminaba por esas calles que no conocia, pero ya no podia mas, tenia que sentirme satisfecha y sabia que solo asi encontraria el tipo de hombre que trataria como queria ser tratada. Como un simple juguete sexual.

Estaba parada en una esquina esperando que el trafico me dejara cruzar la calle cuando un carro se para en frente de mi. Mi corazon latia a mil por segundo, la ventana se bajo y se asomo un hombre mayor de edad, gordo y un poco feo. “Cuanto?” me pregunto, yo estaba tan nerviosa que nisiquiera habia pensado cuanto iba a cobrar. “Lo mismo de siempre mas el cuarto” conteste como si supiera de que estaba hablando. Quito el seguro de la puerta y me meti al carro.

Manejo por algunas calles hasta llegar al motel mas barato que podia haber. Cuando entramos al cuarto las camas estaban sucias, el cuarto olia mal, pero no tan mal como el hombre con el que estaba apunto de hacerlo. Se desnudo y una parte de mi queria salir corriendo, ese hombre debia de darme asco, era viejo, gordo, peludo y olia mal, pero otra parte de mi, la que me estaba haciendo hacer lo que hacia estaba super exitada, sentia un morbo enorme al ver ese hombre, saber que iba a ser suya me hacia sentir sucia, como una puta barata, y eso me llenaba de placer. Tanto que mi tanga ya estaba empapada.

El con sus manos bruscas y rasposas me desnudo y me empezo a besar por todo el cuerpo. Me exitaba sentir su brusca lengua invadiendo mi boca mientras su manos tovaban mis suaves pechos. Me jalaba y apretaba los pezones, lo que causaba dolor y mas placer. Me hizo que me incara para mamarle su verga, cuando la mire me sorprendi, era muy pequena. Nada a lo que yo estaba acostumbrada. Sin dificultad la meti toda en mi boca y la mame por lo que paracian horas. Trataba de no respirar. Cuando se puso dura, sin gran diferencia en el tamano, me acosto en la cama y se puso encima de mi. Su pesado cuerpo estaba sobre mi, mientras trataba de acomodar su pequena verga en mi concha. El empezo a menearse hacia en frente y atras como si ya me estuvira cojiendo, yo no sentia su verga, no sabia si estaba dentro o fuera pero esa imagen me exitaba. Me exitaba al ver su enorme cuerpo sobre mi. Mi suave piel al ser tallada por su peludo y grasoso cuerpo, si enorme panza sofocando mi pequeno abdomen, eso me exitaba y estaba apunto de venirme. “Te gusta mi verga verdad puta? Te estas mojando mucho” me decia mientras empujaba con mas fuerza, no lo podia negar, me sentia sucia y eso me estaba provocando orgasmo tras orgasmo. “Que buena putita eres, ya me voy a venir” al decir eso de levanto y se puso arriba de mi. Todo lo que podia ver era su verga, sus huevos y su enorme panza. Le empeze a mamar la varga, despues de unos segundos le mame sus huevos, su verga era pequena pero sus huevos eran enormes, me exitaba tanto sentir sus peludas y rasposas bolas con mi suave lengua. Mientras se las lamia una y otra vez el empezo a venirse, el primer chorro de leche cayo sobre mi frente, dos mas fueron a dar en mi boca y el ultimo cayo en mi cuello. El se levanto y se vistio pronto. Yo me quede acostada mientas su leche me cubria, el chorro de mi frente ya habia cubierto casi toda mi cara, los de mi boca, apesar de que ya me los habia comido aun tenia el sabor un la boca, eran una delicia, y el gran chorro que cayo en mi cuello ya habia escurrido y cubierto mis pechos. El saco un puno de billetes y me los arroja a la cama “Que buena putita eres. Te di un poco extra para que me esperes en esa esquina manana a la misma hora” El salio del cuarto mientras yo me revolcava en sus mecos y el dinero. Despues de tiempo consegui mas clientes pero siempre estoy puntual en la esa esquina para que el me coja. Llevo dos anos con esa doble vida y nunca he fallado a estar puntual en esa esquina cuando el me dice, tengo muchos mas clientes pero ninguno me provoca lo que el.