Fantasías con mi vecina

📋 Lecturas: ️2194
⏰ Tiempo estimado de lectura: 03:00 min.

Mi vecina no es que sea una belleza, pues como decimos por aquí… Es una gamba, le quitas la cabeza y le comes todo lo demás.            

Como he dicho en el enunciado, mi vecina no es una belleza. Si el típico cuerpazo de mujer es de 90-60-90, ella debe tener 110-70-100, como mínimo, pero se cuida el cuerpo pues va al gimnasio. Siempre luce unos escotes que deja entrever sus grandes tetas y ropa tan ajustada que siempre deja insinuar su culo. Unido a que mide más o menos 1.70, y tiene 35 años, de pelo moreno y largo, no la hace verse tan mal.

He fantaseado con poder acariciar su culo desde que un día al salir de casa, ella estaba subiendo las escaleras con un vestido de vuelo muy por encima de las rodillas, y no se si queriendo o fue casualidad, se agachó, levantándose el vestido y dejando ver su culo, tapado solo por un minúsculo tanga, que se le metía hasta por los labios del coño.

Me imagino a mi vecina en posición de perrito, con su culo en pompa, mis manos agarrándola por sus caderas y con mi polla dentro su culo bombeando sin parar hasta inundarlo con mi leche. O sus deliciosas tetas, de piel blanca, con dos aureolas grades, coronadas por dos erectos pezones los cuales, beso muy suavemente para acto seguido meterlos en mi boca y mamar de ellos, mientras meto mis dedos en su coño, depilado. jugando con su clítoris y luego seguir bajando por su vientre besando cada centímetro de su piel y llegar a su coño, para pasar mi lengua entre sus labios, meterla en su coño y succionar su clítoris, hasta sentir los jugos de su orgasmo en mi boca.

Luego, tumbarme boca arriba, colocarla sobre mi, e introduciendo mi polla en su coño, sentir como me cabalga cual amazona, mientras amaso sus tetas, intercambiando las caricias con su culo y agarrándola por las caderas, atraerla hacia abajo para llenarle el coño con mi semen. Incorporarse y dejándome mi polla limpia con una deliciosa mamada, mientras le como el coño y corrernos juntos, saboreando el néctar el uno del otro.

A veces nos cruzamos en la calle, cuando mi pareja y yo sacamos a los peros y ella saca a la suya. Con disimulo miro el culo de mi vecina, centro de mi imaginación y de mis pajas.

Incluso cuando follo el culo de mi pareja, me imagino que estoy follando a mi vecina. Es solo una fantasía pues, aunque no me creáis, nunca me acostaría con nadie, mientras tengo mi pareja, aunque con mi mente si lo desearía.

Con mi pareja disfruto de buen sexo, por lo que no me hace falta buscar en la calle lo que me dan en casa.

Compartir en tu redes !!
Sevilla1972
Sevilla1972
Relatos: 40