Mi ex follada por un hombre maduro en uniforme

Mi ex pareja me contó una historia intensa y oscura que vivió con un hombre maduro en uniforme. Una tarde, al volver a casa, fue detenida por un oficial que, con una sonrisa insinuante, le pidió sus documentos. Ella, algo nerviosa, intentó mantener la calma y preguntó por qué la había detenido, pero el hombre no respondió. En cambio, le propuso un trato para evitar problemas: subirse al asiento del pasajero y compartir un momento privado. Aunque dudó, decidió aceptar, intrigada y temerosa a la vez.

Dentro del coche, el oficial comenzó a hablarle con voz grave y seductora, pidiéndole su número de celular. Ella se negó, pero la tensión crecía. Él acercó su mano a sus piernas, acariciándolas por debajo de la falda, mientras le susurraba palabras sucias. Ella, con una mezcla de miedo y excitación, sintió sus dedos recorrer su cuerpo lentamente, hasta llegar a su intimidad, que estimuló suavemente. Luego la invitó a corresponderle con caricias, y aunque dudaba, terminó cediendo, tocándolo por encima del pantalón y sintiendo su deseo crecer.

Sin prisas, el hombre desabrochó su cinturón y le susurró con un tono desafiante: “Sé que quieres esto”. Ella quiso resistirse, pero la atracción era fuerte y pronto sus bocas se encontraron en un beso apasionado. Cuando él la acercó hacia sí, ella lo acompañó con un movimiento suave, permitiendo que la penetrara lentamente. Mientras ella se movía al ritmo que marcaba, él le decía cosas al oído, halagando su cuerpo y comparándose con su ex novio, sin esperar respuesta.

La mezcla de miedo, poder y placer creó un torbellino que duró varios minutos, hasta que él alcanzó su clímax dentro de ella. Después, en silencio, ambos respiraron profundo, con una sensación extraña de complicidad que ninguno podía explicar.

¿Te gustó este relato? Descubre nuevas historias eróticas cada día en nuestra página principal.