El morbo de saber que me iban a follar 4 albañiles a la vez

Hola, me llamo Carolina y tengo 18 años. Vivo en la Ciudad de México y hoy les voy a contar relato, que espero que sea de su agrado.

Mi padre había contratado a cuatro albañiles para construir un garaje en el patio de mi casa, ya que necesitaba un lugar para guardar sus vehículos.

Los trabajadores llevaban tres días en la casa trabajando cuando un sábado por la mañana me quedé en casa (no tenía universidad ni ganas de salir). Mi padre tuvo que irse a trabajar, así que me quedé solo en casa. Antes de que se marchara, me dijo que me quedara dentro y que cerrara bien con seguro la puerta principal.

Me fui y cerré la puerta principal, que daba al jardín, y entré en la casa. Cerré la puerta y encendí el televisor. Enseguida me quité la pijama y me puse ropa cómoda para sentirme ligera, o algo así. Me puse unos shorts verdes claros muy cortos y una blusa roja un poco fina y tirantes. No llevaba ropa interior, jejeje. Al terminar de cambiarme, me senté en el sofá para ver la televisión. A la hora, suena el timbre de casa. Fui a abrir y eran los trabajadores que había contratado papá. Uno de ellos era joven, de unos 26 años; el de más edad, de unos 49; otro era gordo y parecía tener unos 37 años, y el último era un señor mayor, de unos 42 años. Entonces, uno de ellos me preguntó por él. Le respondí que no estaba en casa.

Los trabajadores se quedaron en el patio trabajando y yo volví a entrar en casa para seguir viendo la televisión. Casi dos horas después, los albañiles llamaron a la puerta de casa (tock, tock). Me acerqué a la puerta y, a través del cristal, les pregunté.

Yo: ¿Qué se les ofrece?
Albañil 1: ¿Nos podrías dejar pasar?
Yo: ¿Para qué?
Albañil 1: Es que queremos sacar una herramienta.
Yo: Díganme cuál es y se la paso.
Albañil 2: Bueno, pásanos un perno.
Yo: ¿Un qué?
Albañil 2: Un perno.
Yo: ¿Am? ¿Cómo es?
Albañil 3: Mejor déjanos sacarlo.
Yo: Es que no estoy autorizada para abrirles.
Albañil 4: Ja, ja, ja. Si quieres, simplemente entro yo.
—¿Qué? Pero que sea rápido.

Lo pensé mejor y abrí la puerta, los cuatro albañiles entraron. Por alguna razon ese dia estuve bastante receptiva y tener cuatro hombres cerca de mi me pusieron caliente. Uno de ellos cerró la puerta y los otros tres me decían cosas lindas y subidas de tono. Los lleve al cuarto más cercano (el mío). Me acostaron boca arriba en la cama y yo solo me dejaba llevar. Dentro de mi intentaba con todas mis fuerzas quitármelos de encima, pero solo eran deseos (así que los dejé). Empezaron a manosearme y a decirme cosas como: —Pero mira nada más qué rica estás —y cosas así. Entonces, uno de ellos metió la mano dentro de mi short y empezó a manosear mi panochita; otro empezó a lamer una parte de mi rostro y cuello mientras su mano acariciaba una de mis bubis; otro arrancó mi playera de tirantes y empezó a lamer mi otra bubi, y el último trataba de quitarme mi short.

No saben lo excitada y asustada que estaba, porque me gustaba lo que hacían, pero me entró el morbo al saber que me iban a follar cuatro hombres a la vez, así que poco a poco fui cooperando hasta que le agarré el pene a los dos (al gordito y al más grande de edad) que estaban besando mis pechos. Entonces se dieron cuenta de esto, se levantaron y se quitaron los pantalones, poniendo sus penes en mis manos. Comencé a masturbarlos. Los otros, que estaban tan ocupados en mi entrepierna y mis muslos, vieron lo que estaba haciendo con sus dos compañeros y también se quitaron los pantalones, frotando sus penes por mis muslos, pies, abdomen, etc.

Uno de ellos me levantó de la cama, me puso de rodillas e introdujo su pene en mi boca, donde empecé a hacerle sexo oral. Otro de ellos levantó mi cintura y empezó a penetrarme, mientras que otro me penetraba por mi boca. Los otros dos solo esperaban su turno. Unos se quitaban y otro pene se introducía dentro de mí hasta que uno de ellos (el más gordito) me agarró de la cama, se acostó y yo me puse boca abajo sobre él. Introdujo su verga en mi panochita, otro se puso encima de mí y me penetró en la colita y otro puso su pene en mi boca. Comenzaron a cogermela los tres al mismo tiempo y, después, se iban turnando hasta que acabaron eyaculando dentro y fuera de mí.

Yo estaba exhausta, así que cuando terminaron me acosté y me vestí. Se fueron, y cuando me repuse un poco encontré mi cuarto hecho un desastre: estaba empapada en sudor y semen, y la cama estaba desordenada, así que me puse a limpiar.

Al día siguiente los esperé para otra ronda, pero no llegaron. Ya nunca más los volví a ver.

Eso fue todo, espero que les haya gustado. ¡Por favor, dejen un comentario! Comentarios positivos, ¡es mi primer relato!
Besitos :* :*
Chao.

Compartir en tus redes!!
Carolina Sexy
Carolina Sexy

Soy una chica muy caliente y posesiva. Me gusta leer los relatos de esta pagina. Pero lo que mas disfruto es compartir relatos eroticos que cuentan mis amigas y muchos que son de mis fantasías eróticas que con personajes logro trasmitir y publicar en esta comunidad.

Artículos: 14