Una dama con mirada achinada

Autor: Anónimo | 22-Aug

Dominaciones
Se desean a las mujeres como se desea la fruta. Carnosas, llenas de color, libidinosas y con mucho jugo. Ella era sensual y bonita, con los labios gruesos y la mirada achinada. La conocí una tarde de tormenta que mi mirada se detuvo en la suya gris para no virar ni un solo grado. Tenía media melena y el contorno ovalado de una cara que entremezclaba la dulzura con el alma salvaje de un felino. La piel se pincelaba así misma de un oscuro leve, casi fronterizo con el albor de las primeras osadías del negro, y su indumentaria blanca dejaba entrever la cilíndrica dureza de dos pezones grandes que se marcaban sobre el tacto sensual de la seda. Sus ojos oblicuos le proporcionaban el aire interesante de quien nunca deja ver del todo sus sentimientos. ¿Quién era aquel ser que se enfrentaba a mi mirada?.

Cuando más absorbido estaba por sus fascinantes ojos, dejó caer descaradamente una copa de brandy sobre su vestido apantalonado. El brandy, que había caído sobre su vientre, mostraba la primera apariencia de un pubis que yo ya deseaba tocar. Era como un juego atávico de los que se utilizaban en la vieja china para revelar textos escritos con zumo de limón. Ella había utilizado brandy, y no dejaba de mirar. No se movía. Era una escultura tallada y yo un sencillo observador. Bastó un chasquido de sus dedos para que el local se vaciara y sólo quedáramos ella y yo. Hice un ademán de marchar, pero alguien situado detrás me significó con un gesto suave que no procedía. Las luces cambiaban y el color de su pubis también. Llegó un chino fibroso semidesnudo con una bandeja de plata. Ella depositó su ropa en ella. Estaba completamente desnuda y yo absolutamente paralizado. Seguía sin moverse. Luego se aproximó una mujer de mediana edad con una bandeja de plata para mí. Comprendí que debería depositar mi ropa en ella y me quede desnudo.

Al poco varios hombres colocaron una cama enorme en el centro de la antigua pista de baile y la dulce princesa china se tumbó al borde apoyando sus pìes en el suelo. Yo no sabía qué hacer. Alguien me indicó que no era mi turno y decidí permanecer. Abrió sus piernas y un esclavo turco calvo, grueso ,de brazos fornidos inclinó su boca para comerla el coño. Se cerraron sus ojos mientras aquel bestia saboreaba el sexo de su ama con la fruición de quien se come una fruta. Gipsela se movía y elevaba al aire sonidos que sólo se definían por la proximidad de su postura. Aquel hombre, era evidente, tenía su función determinada a lamer los labios inferiores de su dueña. Se retiró marchando hacia atrás con genuflexiones propias de alguien sin voluntad. Su mirada estaba contraída pero excitada y su musculación erizada. Más tarde aparecieron dos hombres con un Gran Danés. El perro comenzó por lamer la vulva de su dueña, dejando una lengua interminable sobre su sexo rosado. Yo, mientras, entreveía los labios y el diámetro de aquel coño magnífico, pero seguía sin saber para qué estaba. Se corrió a lo largo de dos interminables minutos durante los que el can la lamía incansablemente y después se retiró. Llegaba mi turno. Se volvió de espaldas, más hacia dentro de la cama. Un criada se acercó con una braguita que le dejaba al aire el ano. Su sexo y sus ojos habían desaparecido a mi mirada y sus senos, vueltos sobre la cama, no existían. Sólo la impresión de su culo y su media melena azabache, me corresponderían.

El esclavo más cercano me tomó del brazo y me llevó junto a ella. Noté que notó mi presencia por el movimiento de su cuerpo. Creo que fue entonces cuando intuí que debería de hacer. Abría y cerraba la raja del culo con una facilidad pasmosa. Se movía hacia adelante y hacia atrás. Yo no estaba excitado, y me avergoncé. Vino otro esclavo con un pastor alemán. Me tumó dulcemente sobre la cama y dejo que el perro me lamiera el pene. Creció hasta un grado de verticalidad impensable, terso e inmaculado. Comprendí que debería encularla.

El esfínter parecía untado de aceite o de alguna substancia especial y se movía, palpitaba en torno a mí. Se abría y se cerraba. La tomé por las caderas y ella dejó escapar un ruído extraño. Luego le introduje el dedo en el ano. Vibraba de placer. Chillaba y las luces se hacían ténues hasta casi desaparecer. Sólo quedaba un hálito, suficiente como para que yo prosiguiera. Mi sexo estaba duro y estirado. La penetré lentamente mientras jus jadeos se transformaban en gritos profundos que aumentaban a medida que mi carne la derribaba más centímetros de intestino. Las luces no existían, porque aquella dama china sólo debía consistir que los esclavos presenciaran sus otros orgasmos. Yo entraba y salía con fuerza deseándo dañarla y ella, notándolo, lo buscaba. Inclinaba su culo y profundizaba la penetración bruscamente como si quisiera rasgarse el recto. Me corrí con su orgasmo más grande y nuestros últimos espasmos se diluyeron en la oscuridad. Permanecí dentro un rato, mientras ella aún se movía y yo conservaba la erección. Susurraba determinadas palabras ininteligibles hasta encontrar silencio.

Se deshizo de mi cuerpo y desapareció. Yo me quedé dormido y luego aparecí en la calle como si todo hubiera sido producto de un sueño.

Relatos eróticos relacionados

Mi profesor del colegio es un pervertido. El otro día, vi cómo se mordía los labios al ver el escote de mi amiga Ana. Como estábamos en examen, nadie más se dio cuenta, pero yo siempre lo estoy vigilando porque sé que es un pervertido asqueroso. Desde aquella vez, me he fijado cómo se le van los ojos cuando Cintia pasa frente a él y cómo le encanta que Raquel le ayude a borrar el pizarrón. Sólo para estar cien por ciento segura de lo que digo, decidí hacer la prueba...
19-Jul
66070
Había sido desvirginado, mi macho me había poseído y había eyaculado en mí, no me había guardado nada, culeado completamente, pero sentía por un lado cumplida mi fantasía pero no había sido los espectacular que tanto se comenta, en los relatos gays. Además tenía un fuerte cargo de conciencia, me preguntaba, ¿Cómo esta calentura me había llevado a coger con un hombre?. Era un manojo de dudas. Ahora seguiré teniendo apetito sexual hacia las mujeres, ¿o no?. Bueno esa última duda, acerca de la atracción mía hacia las mujeres, me...
11-Jun
142104
[Confesiones] Me llamo Silvia, tengo 27 años, he estado casada los últimos cuatro años y me he separado hace un mes, el motivo fue, que mientras yo estaba de vacaciones, mi marido se lió con su secretaria, encontrándole un día que regresé de improviso en nuestra cama, por lo que nuestra separación fue rápida y de total acuerdo.
03-Apr
32050
[Grandes Series] Después de la jornada del sábado cargada de placeres y lujuria, entre deliciosos goces y satisfacciones carnales, esos momentos libidinosos y desenfrenados, jamás quedarían en el olvido de los habitantes de la casona de la familia de Rodrigo que plenamente agotados, se llamaron al descanso. La mansión se sumió en un total silencio, cubierta de una densa oscuridad. El canto de los zorzales en esa madrugada no fue escuchado, estaban todos demasiados acabados. El sol irrumpió en la mañana a partir de las 6:00. El buchoneo de las palomas, el cacareo de las gallinas, el clásico gozne y griterío de los patos criollos y gansos con algunos relinchos se mostraron nerviosos al acercarse las 8:00, horario ya pasado de sus turnos para sus raciones de maíz y alfalfa. La peonada, mateando y prendiendo fuego con los desperdicios rastrillados de los patios que rodean el viejo chalet central de la Hacienda. Hermosa mañana de fines de verano de ese domingo de febrero, pesado y caluroso.
19-Apr
31332
7.Al otro día casi me mato a chaquetazos? llevaba cuatro y todavía no era medio día, otra vez estuve en un permanente estado de semi erección y cuando las imágenes volvían a mi cabeza sin darme cuenta ya estaba otra vez dándole duro? ya hasta me dolía? pero no podía evitarlo? como a las tres de la tarde le hablé a mi hermana para invitarla a una fiesta de graduación en la noche y ella aceptó gustosa. Iba a ir con una ex, pero le hablé para cancelarla. Entonces...
21-Dec
40215
Aclaración: Todo el instrumental técnico descrito se pudo identificar a posterior a los hechos narrados antes no se tuvo noción ni que eran ni que uso se les daría? Un mes y medio después que Cecilia abandonara nuestra casa, un contrariado Claudio, telefonea para darnos la noticia: -?Soy Claudio, Cecilia está embarazada, no sé como pasó, debe haberseme roto un forro?- Unos días mas tarde dan una fiesta para hacerlo oficial, ya en el lugar estando solo con mi mujer en la cocina y lejos del ruido, aparece Cecilia ,se acerca, toma mi...
20-Oct
27152
Un día en una fiesta coincidimos, pues yo normalmente no salía con gente de la chamba a tonos porque en su mayoría eran tíos pero ese día no sé qué me pico y dije ya que chucha... total me había peleado con mi flaca y no me iba a quedar con las ganas de salir. llegue a la casa del doctor donde era la reunión con un roncito, prendo mi fallo y la veo... con un pantalón jean pegado (que hacía notar ese culito pequeño pero bien parado y en...
30-Dec
39294
Mi primera vez no fue muy tradicional que digamos, pasó hace dos años y me animo a contarlo ahora porque cumplí los dieciocho años y soy mayor de edad. Soy única hija y mis padres son mayores, llegando a los cincuenta. Mi tía, hermana de mi madre es mucho más joven, de unos treinta años, como suele pasar frutos de un descuido de mis abuelos, no fue buscada, fue ?un regalito?. Los veinte años de diferencia entre ambas pesaban demasiado, mi madre una mujer muy reservada, jamás hablaba de sexo conmigo,...
26-Mar
18468
La prima Lorelai, en realidad es la esposa de mi primo Jonás, ella es una mujer grande, y por grande me refiero a de esas mujeres que tienen sobrepeso pero se antojan? Lorelai, en ese entonces tenía unos 40 años, es alta de 1.78 de estatura, piel blanca, cara larga y mejillas prominentes, boca grande con labios gruesos y llenos de carne, nariz de bola, ojos grandes y de color avellana, cabello largo rizado hasta media espalda, unos enormes pechos muy flácidos, un prominente abdomen producto de sus tres hijos,...
30-May
148114