Mi adorada maestra de secundaria

Eran mis días de secundaria, y siempre recordaré a mi maestra, una mujer morena clara sumamente hermosa, con un cuerpazo, con las caderas más hermosas que he visto, en ese entonces yo tenía 14 años, ella tal vez 34 o 35, nunca había tenido una maestra que provocara tantos pensamientos en mi, y por supuesto nunca faltaba a ninguna de sus clases, realmente era mi amor y deseo secreto. La diferencia de edad era un punto excitante, imaginar poder estar en la cama con una mujer como ella., cielos!, en las noches mientras mis compañeros se masturbaban viendo revistas de la época,(Adán, Playboy, Hustler, etc.)yo me masturbaba fantaseando con ella, verla caminar era divino, tenía las nalgas más ricas del mundo, y como siempre traía puestos tacones altos, pues sus ricas nalgas sobresalían más, mis fantasías con ella eran recurrentes y eso me estaba provocando muchos desvelos y muchas chaquetas también, mi fantasía recurrente es que ella me invitaba a su casa para quedarme a dormir, y que la espiaba mientras se bañaba pudiendo admirar su cuerpazo, me provocaba unas erecciones enormes, así ella me llamaba para pedirme una toalla y dejaba entrever su hermoso cuerpo provocándome, para después mostrarme su cuerpo cubierto por lencería de seda, e invitándome a admirarla. Mi primer orgasmo múltiple lo tuve masturbándome pensando en tenerla en la cama de a perrito..mmm!!!, recuerdo que le hice un agujero a un pantalón y lo rellene de ropa, para meterle mi verga imaginando que eran aquellas hermosas nalgotas las que me estaba cogiendo, a esa edad me masturbaba hasta viendo catálogos de lencería, pero imaginar toda una fantasía con esa hermosa mujer era algo único, lo sabía simplemente por que a la hora de venirme fantaseando con ella, mis chorros de leche salían con una fuerza mayor que otras ocasiones. A veces me preguntaba si se daba cuenta como babeaba por ella, seguramente no se lo imaginaba, y en ese tiempo confesarle mi amor y deseo por ella, hubiera resultado quizá en una escandalo y un castigo por parte de mis padres, no sé, solo podía estar con ella en mis fantasías, a esa edad es muy común que adolecentes fantasean con mujeres mayores, yo fantaseaba con ella, para mi la mujer que más deseaba en ese entonces, suponiendo que hubiera podido acostarme con ella, no creo que hubiera durado 10 segundos por la excitación. Otra fantasía recurrente era que me visitara cuando mis padres no estuvieran en casa, y hacerle el amor en mi cama, poniendo su divino trasero bien empinado en el filo de la cama y llegar por atrás y sin condón para meterle la verga hasta el fondo, y cogérmela muy rico., recuerdo una noche pensando en ella, estaba sentado en la orilla de mi cama y enfrente a dos metros una cómoda con un espejo, comencé a jalármela pensando en sus deliciosas nalgas y sus hermosas piernas, una y otra vez, el orgasmo llegó y mi leche fue a dar hasta el espejo de la cómoda, eso provocaba esa hermosa mujer, mi adorada maestra, mi secreto. Se acercaba el fin de cursos y se dio la suerte de que se organizó un convivió en su casa, en ese entonces su esposo (su afortunado esposo) estaba de viaje por trabajo, y bueno era difícil que algo como lo que yo deseaba sucediera en aquel momento, sin embargo me las arregle para ir hasta su cuarto y robarme unas pantimedias de ella, cielos esa noche vacié toda mi leche sobre esas bragas; llegó el último día de clases, salía de la secundaria y prácticamente no la volvería a ver, y sin importarme ya nada, al momento de despedirme de ella, en lugar de besar su mejilla besé sus labios, el beso más rico de mi adolescencia, lo que me encantó es que no le molestó, sonrió y eso me dio cuerda para otra noche de chaquetas pensando en ese momento, en aquel tiempo no existían tantos medios de comunicación como los hay ahora, por lo que le perdí la pista, al tiempo la fui a buscar al colegio donde trabajaba, pero no la volví a encontrar.